2004 fue un buen año para los mutantes de Marvel, con muchos cambios editoriales. De eXtremo a eXtremo, los X-Men se mantenían vigentes.
Casi a mediados de año, la línea de comics fue reestructurada casi en tu totalidad. La era de Grant Morrison al frente de New X-Men, había llegado a su fin. El polémico autor había dejado a los mutantes en un lugar distinto de donde los había encontrado.
Recargando energía.
Marvel Comics necesitaba, en general, dar una nueva dirección y unificar su concepto alrededor de los mutantes. El proyecto fue bautizado como “Reload” (“recargar”).
Durante algunos días estaremos tratando este tema y recordaremos la manera en que Marvel dio nueva dirección a los títulos de mutantes.
El mes de abril de 2004, fue utilizado por la editorial para dar cierre a varios proyectos y así, poder reiniciar en mayo. Algunos de los comics de mutantes permanecieron sin cambios, mas no así los principales.
Claremont. De X-Treme a Uncanny.
Para compensar la salida de Morrison, se requería de un escritor que fuera igual de relevante, por lo que se decidió que fuera Chris Claremont quien lo reemplazara.
Claremont había sido el argumentista responsable de la fama de los mutantes desde 1975, cuando, acompañado del artista y coescritor, Dave Cockrum, posicionaron a X-Men como una de los comics más populares. Cuando Cockrum fue reemplazado por John Byrne en 1977, el éxito siguió en aumento.
La fama de X-Men no decayó sino hasta muchos años después. Entre tanto, pasó a ser toda una línea de revistas.
En 2001, con el ingreso de los escritores Grant Morrison (en X-Men) y Joe Casey (en Uncanny X-Men), se hizo una reestructuración con el fin de que los comics se parecieran más a las películas.
En ese entonces, Chris Claremont acababa de regresar a escribir ambos títulos, pero fue despedido por el editor en jefe de Marvel, Joe Quesada, con quien no congeniaba.
No obstante, en Marvel sabían el valor de mantener a Claremont escribiendo. Por ello, se le dio un tercer título de X-Men, que no interferiría en la continuidad principal.
Todo lo que empieza…
La nueva publicación fue nombrada, X-Treme X-Men. En esta, Claremont podría utilizar aquellos mutantes que no hubieran sido elegidos por Morrison o Casey. El arte de los primeros números fue hecho por el español, Salvador Larroca.
X-Treme X-Men se mantuvo con buenas ventas y fue por ello que a Claremont se le pidió regresar al título principal cuando Morrison terminó su etapa.
Para ello, debía poner fin a X-Treme.
El cierre de la revista se produjo con la edición #46, publicada el 28 de abril de 2004, por Claremont y con arte a lápiz de Igor Kordey, con una portada de Larroca.
En el trascurso de las historias, el elenco de Claremont había crecido considerablemente y en los últimos números constaba de Storm, Kitty Pryde, Rachel Summers, Bishop, Cannonball, Magma, Sunspot, Gambit, Rogue, Sage y Callisto, además de aliadas como Evangeline Whedon.
Los X-Men, una familia.
El escritor nacido en Inglaterra, al haber cocreado a la mayoría de los protagonistas, los conocía perfectamente y sabía cómo equilibrar las historias. Los momentos de humor, el drama, la acción y el desarrollo de los personajes, se daban en cada edición.
En el último número, Claremont explica el panorama general de los comics de X-Man para familiarizar a los lectores.
El relato es relativamente tranquilo con el fin de dar cierre parcial y ofrecer agradables momentos, tales como la reconciliación entre Archangel y Storm o el regreso de los poderes de Gambit (que había perdido al igual que Rogue).
Otra secuencia de valor, es cuando vemos a Gambit, enseñar a cocinar a Bishop. Recordemos que ambos eran acérrimos rivales cuando se conocieron. Además, Bishop, al provenir de un futuro apocalíptico, poco conoce de la cocina tradicional.
Dando cierre apropiado.
Por otro lado, Magma explica su pasado a Cannonball, al haber recuperado la memoria. Su nombre no es Allison Crestmere (como se le hizo creer durante un tiempo), sino Amara Aquilla (como se le conoció originalmente), ciudadana de la civilización perdida conocida como Roma Nova. Claremont desenreda con simpleza la historia de Magma, que se había vuelto demasiado complicada.
Entre tanto, Rachel concluye, en una plática con Kitty, que adoptará el nombre código de su difunta madre (Jean Grey), Marvel Girl. Jean muere en el comic de Grant Morrison, New X-Men #150. En venganza, Wolverine decapita a Magneto.
Durante la cena, y como conclusión, Storm pide a sus amigos el apoyo para conformar la fuerza policial denominada X.S.E. (X-Treme Sanctions Executive), a solicitud de las Naciones Unidas.
El hecho puede resultar como premonición, pues en el futuro de Bishop, él es parte de una policía de mismas siglas, X.S.E., pero que significan, Xavier Security Enforcers (Ejecutores de la Seguridad de Xavier).
El nuevo panorama.
De esa manera concluyó el primer volumen de X-Treme X-Men.
Claremont continuó escribiendo a los mutantes al mes siguiente con Uncanny X-Men #444.
Marvel dio cierre a varios títulos ese mes de abril, al punto de publicar dos o hasta tres números de cada uno (cuando, normalmente, se publica una sola edición por mes).
Los comics que tuvieron más números durante abril, fueron:
New Mutants #11, #12 y #13 (finalizó este comic para ser relanzado).
New X-Men #155 y #156 (y regresó a su nomenclatura original, X-Men).
Uncanny X-Men #442 y #443.
X-Treme X-Men #45 y #46.
Mutatis mutandi.
Así también, otros comics que no tendrían afectaciones directas, vieron aumentada su producción:
Weapon X #21 y #22.
Wolverine #13 y #14.
X-Statix #21 y #22 (terminó con el #26).
Las revistas que continuaron con normalidad, fueron Cable/Deadpool, Emma Frost, Exiles, Mystique, X-Men Unlimited y las miniseries Wolverine/Punisher y Wolverine: The End.
En ese momento, el escritor Chuck Austen y el dibujante Salvador Larroca producían Uncanny X-Men y fueron reubicados en New X-Men, cuando regresó a su nombre como X-Men.
El nombre de “New X-Men” se utilizó en una nueva revista con varios nuevos mutantes.
Mañana continuaremos con este tema. Por lo pronto, te ofrezco la nota con el inicio de la era Morrison:
Su conclusión:
El atropellado inicio simultáneo en Uncanny X-Men:
Un vistazo global al título, X-Treme X-Men:
X-Men dice adiós a Claremont:
El fin de la primera etapa de Chris Claremont, en 1991:
Y un repaso a los primeros 48 años del comic Uncanny X-Men: