Publicidad
Cine

Perfume, la historia de un asesino, es un reto sensorial.

Publicidad

¿Cómo describes algo sin los medios posibles? ¿Y cómo cimentas todo un trabajo en ello? Perfume, la historia de un asesino, es un reto sensorial.

(Perfume, la historia de un asesino, es un reto sensorial)

Perfume, del libro al cine.

En 2006 hubo una película que generó una gran atención positiva, debido a su propuesta e historia. Esta última, sin embargo, no era del todo desconocida, pues es la adaptación de la novela de 1985, Das Parfum: Die Geschichte eines Mörders, de Patrick Süskind.

Esta obra literaria es una de las más famosas de Alemania y ha vendido más de 20 millones de copias. También se ha traducido a 49 idiomas -al menos hasta 2012-, que incluyen árabe, catalán, ucraniano, vietnamita, hebreo y macedonio, entre otros.

Desde el año 2000 se hicieron planes para la adaptación fílmica después de que el productor Bernd Eichinger, convenciera al autor para obtener los derechos y se recurrió a Tom Tykwer (Corre, Lola, corre) para dirigir y coescribir el guion.

La producción es alemana y fue realizada, principalmente, de la compañía Constantin Film, con un ambicioso presupuesto de 50 millones de euros, que la coloca también como una de las más caras hasta ese momento de ese país. La taquilla duplicó esa cifra.

Perfume, es la historia de Jean-Baptiste Grenouille, un hombre que queda huérfano desde el momento de nacer, cuando su madre, que trabaja en un mercado de pescados, lo abandona a su suerte. La mujer es descubierta y ejecutada por su crimen y, el niño, recibe un nombre para ser dado en adopción.

En el libro, por los rasgos poco agraciados del niño, es que Jean-Baptiste (Juan Bautista), obtiene el apellido de Grenouille (sapo).

Jean-Baptiste tiene un olfato sobrehumano, percibiendo olores que ningún otro humano puede. El joven descubre la importancia de los olores y su influencia en la percepción de las personas. Por ello, se da a la tarea de aprender la técnica para crear perfumes perfectos.

Grenouille descubre en él una irónica característica, no tiene olor. Sin embargo, con un perfume consigue modificar la manera en que la gente lo ve y se gana su respeto.

Otro problema de Grenouille, es que, para conseguir su objetivo de crear el perfume perfecto, se convierte en un salvaje asesino serial. Su sociópata forma de ser y de actuar, lo hacen una amenaza para los habitantes de Francia, en especial para las jóvenes bellas.


Una buena adaptación.

El nacimiento de Grenouille ocurre en el año de 1738, por lo que se trata de una historia de época. Son de suma importancia las condiciones higiénicas propias de este tiempo para la historia pues, París, al ser una de las ciudades más habitadas del planeta en ese tiempo, era un foco de infección y con una mezcla de olores muy particular.

La premisa hacía de Perfume un proyecto diferente y con potencial; después de todo, la cinematografía se trata acerca de experiencias visuales y auditivas, no olfativas. Incluso, los libros nos permiten recurrir a la imaginación y a nuestra memoria casi de manera inconsciente.

El cine, al ser un medio más veloz y breve que el literario, tiene que ser muy perspicaz en su manera de comunicar. Es por medio de la dirección de Tykwer y la fotografía de Frank Griebe, que se logra este efecto.

La película inicia con una toma de Jean-Baptiste en un calabozo, en un alto contraste donde resalta el brillo enfermo de sus ojos y la prominencia de su nariz. Con esos segundos, el director nos ha indicado casi todo.

Secuencias como el nacimiento del futuro asesino en el mercado, se centran primordialmente en las texturas, sobre todo en aquellas de los objetos de olores fuertes con los cuales estamos familiarizados. Entre más grotescos sean estos, mejor. Así, nuestra memoria nos lleva a donde el director desea.

Al recurrir a este tipo de elementos, el filme ya es, de entrada, incómodo. Su intención es tratar de mostrar un poco con lo que debe vivir Granuoille. Tomas cerradas, centradas en las texturas son utilizadas con inteligencia.

El elenco fue reconocido en su momento. Como Jean-Baptiste, el actor Ben Whishaw; además de Alan Rickman, Rachel Hurd-Wood, Dustin Hoffman y John Hurt, es el inevitable narrador.

La película tuvo una buena aceptación y no deja de tener sus detractores, aseverando que la obra original era demasiado difícil de adaptar. Y sí, no era un proyecto fácil de abordar, mas su resultado es una buena traducción.

Perfume, la historia de un asesino, se estrenó el 14 de septiembre de 2006, en Alemania, y el 4 de octubre en Francia.


Te presento la nota de Corre, Lola, corre:


Realmente amor, con Alan Rickman:


Kramer contra Kramer, con Dustin Hoffman y Meryl Streep:


Y El hombre elefante, con John Hurt y Anthony Hopkins, dirigida por David Lynch:

Publicidad
Publicidad