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Bienestar

Especialistas de la UNAM llaman a reorganizar el sistema de cuidados en México

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El área de cuidados es fundamental para la construcción de la paz y el tejido social, y no debe recaer únicamente en las mujeres, sino en hombres y en todas las poblaciones, afirmó Verónica Montes de Oca, investigadora del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM.

Durante la mesa redonda El Sistema Nacional de Cuidados en México, organizada por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), la especialista destacó que esta labor implica sostener vínculos afectivos y también brinda “una conciencia de nuestro ser como individuos pensantes, afectivos”.

Montes de Oca subrayó que es necesario reorganizar la responsabilidad de los cuidados y reconocer el trabajo no remunerado que realizan principalmente las mujeres. Recordó que ni el mercado laboral ni las políticas públicas consideran estas tareas como parte de la asistencia ni como actividades económicas esenciales.

Por su parte, Patricia Claudia Brogna, profesora de la FCPyS, señaló que el Sistema Nacional de Cuidados debe articularse como un conjunto de políticas, servicios y acciones tanto públicas como privadas, pero sin delegar al ámbito privado lo que compete al Estado. “Si no, se replicarían disposiciones que descargan responsabilidades en las familias”, advirtió.

En su intervención, César Luis Cárdenas Varela, profesor de la FCPyS, recordó que en la Ciudad de México viven más de nueve millones de personas y existen 6,630 establecimientos de cuidado; de ellos, 96% están dirigidos a infantes y solo 3% a adultos mayores.

El académico señaló que este desequilibrio refleja la falta de atención al envejecimiento de la población. Agregó que las mujeres viven más años, pero en condiciones de abandono y sin seguridad social, lo que las coloca en desventaja.

Cárdenas enfatizó que diseñar un sistema de cuidados requiere indicadores claros y replicables, segmentar a la población por cohortes de edad y considerar las redes de soporte familiar. Solo así, dijo, será posible crear políticas públicas que contribuyan a sociedades más justas, igualitarias y con modelos de vida dignos.

Con información de la UNAM.

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