Entra en vigor alto al fuego entre Israel y Hamás tras dos años de guerra en Gaza
Israel y Hamás iniciaron este viernes la aplicación del alto al fuego acordado tras dos años de conflicto, marcando el inicio de una tregua que busca poner fin a una de las guerras más devastadoras en Medio Oriente.
Con el cese de hostilidades, decenas de miles de desplazados palestinos comenzaron a regresar a sus hogares, muchos de ellos reducidos a escombros, mientras los equipos de rescate de la Defensa Civil gazatí iniciaron labores para recuperar cuerpos entre las ruinas.
“Desde la entrada en vigor del cese el fuego en Gaza, se encontraron 63 cuerpos en las calles de Ciudad de Gaza”, informó Mahmud Basal, portavoz de la agencia de rescate bajo la autoridad del gobierno de Hamás.
Primera fase del acuerdo
La primera fase del pacto, alcanzado tras negociaciones indirectas en Egipto con mediación de Estados Unidos, Catar y Turquía, contempla la liberación de los rehenes israelíes retenidos en Gaza en un plazo de 72 horas, a cambio de la excarcelación de 250 detenidos por razones de seguridad y 1,700 palestinos arrestados desde 2023.
El ejército israelí confirmó que sus tropas comenzaron a replegarse hacia las denominadas “líneas amarillas”, en cumplimiento del acuerdo.
“El periodo de 72 horas para la liberación de rehenes comenzó”, declaró el enviado presidencial estadounidense Steve Witkoff, quien agregó que el Pentágono verificó la retirada inicial de las fuerzas israelíes.
El primer ministro Benjamín Netanyahu aseguró que espera celebrar un “día de alegría nacional” el próximo lunes, cuando los rehenes regresen a casa.
Por su parte, el presidente estadounidense Donald Trump, mediador del acuerdo, manifestó confianza en la duración de la tregua:
“Están cansados de luchar”, dijo al confirmar que viajará este fin de semana a Israel y Egipto.
Retorno y devastación
Según la Defensa Civil de Gaza, unas 200,000 personas emprendieron este viernes el retorno al norte del enclave. Algunos de ellos encontraron sus casas destruidas en Jan Yunis y otras localidades del sur, donde las operaciones militares fueron especialmente intensas.
“Solo rezo para que mi casa no haya sido destruida. Esperamos que la guerra termine de una vez por todas”, dijo Mohamed Mortaja, un desplazado de 39 años que regresaba a Ciudad de Gaza.
El conflicto, iniciado el 7 de octubre de 2023 con el ataque de Hamás en territorio israelí —que dejó 1,219 muertos, en su mayoría civiles—, ha cobrado desde entonces más de 67,000 vidas en Gaza, según datos del Ministerio de Salud del enclave, verificados por la ONU.
Un futuro incierto
Aunque el alto al fuego genera esperanza, persisten cuestiones pendientes, entre ellas el desarme de Hamás y la propuesta de crear una autoridad de transición en Gaza impulsada por Trump, que el movimiento islamista ya rechazó.
La ONU mantiene su alerta sobre la crisis humanitaria derivada del bloqueo israelí, que provocó escasez extrema de alimentos y una situación de “hambruna” en algunas zonas del territorio.
Mientras tanto, tanto en Israel como en Gaza, la población celebra el silencio de las armas con cautela y un deseo compartido: que la guerra termine para siempre.
Con información de AFP







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