El trabajo que sostiene a México (aunque no se pague)

¿Cuánto vale cuidar, limpiar, cocinar, acompañar o escuchar?

Aunque no aparezca en los recibos de nómina, todo ese esfuerzo tiene un valor enorme… y el INEGI acaba de ponerle número: 8 billones de pesos.

Sí, leíste bien: 8 billones. Ese es el valor económico del trabajo no remunerado que millones de personas realizaron en México durante 2024. Según el INEGI, equivale al 23.9% del Producto Interno Bruto (PIB) —es decir, casi una cuarta parte de todo lo que produce el país.

El motor invisible del hogar (y del país)

Detrás de ese porcentaje hay horas y horas de cocinar, barrer, cuidar, acompañar o hacer tareas.
Y, como era de esperarse, la mayor parte de ese trabajo lo hacen las mujeres.

Ellas aportan 72.6% del valor económico total de estas labores, mientras que los hombres contribuyen con el 27.4%.

En promedio, cada mujer generó el equivalente a 82,339 pesos anuales, sin recibir un solo peso a cambio.
Los hombres, por su parte, aportaron el equivalente a 34,695 pesos al año.

Más que economía: tiempo, cuidado y emociones

El estudio del INEGI también incluye algo nuevo: los cuidados emocionales —escuchar, consolar, acompañar—, un tipo de trabajo invisible que nunca se había medido.

Si se suman estas horas, el valor del trabajo no remunerado sube hasta el 26.3% del PIB.

En otras palabras, si este trabajo tuviera salario, sería el sector más grande de la economía mexicana.

¿Dónde se trabaja más (sin paga)?

Los estados con mayor valor económico de este tipo de labores fueron:

• Estado de México (11.6%),
• Ciudad de México (6.7%),
• Jalisco (6.6%),
• Veracruz (6.3%) y
• Nuevo León (5.6%).

No es coincidencia: son entidades con alta población y con miles de hogares donde la vida cotidiana depende de ese trabajo no remunerado.

El valor que no se mide en pesos

El trabajo doméstico y de cuidados no solo limpia casas: mantiene familias, comunidades y economías funcionando.

Y aunque el INEGI no paga por barrer, cuidar o escuchar, sí deja claro algo: sin ese trabajo, el país simplemente no podría operar.

Así que la próxima vez que alguien diga que se dedica “al hogar”, recuerda: está sosteniendo casi una cuarta parte de la economía mexicana.