Los envíos de dinero del exterior a México por connacionales alcanzaron cuatro mil 151.87 millones de dólares durante marzo, una cifra sin precedentes para el rubro de las remesas, de acuerdo con las cifras divulgadas por el Banco de México.
Frente a febrero, la cifra aumentó 30.83 por ciento, es decir, un monto nominal de 978 millones de dólares, y frente a marzo de 2020 fue un incremento de 2.65 por ciento
El fenómeno de un incremento en los envíos se da por cuestiones de un mayor ingreso real en Estados Unidos, lo que da oportunidad a que los “paisanos” puedan mandar divisas a sus familias que se encuentran en México, dado que un peso débil da la conveniencia de hacer atractiva la transacción.
Los estímulos económicos del gobierno del presidente Joe Biden, de rondas de cheques por mil 400 dólares a cada contribuyente con un presupuesto autorizado de casi 2 billones de dólares, ha incrementado la dinámica económica de Estados Unidos, lo que ha beneficiado a su mercado y el ingreso de los trabajadores, entre ellos, los millones de mexicanos laborando en los diferentes rubros productivos de ese país.
Conforme a las cifras del Banco de México, durante los tres primeros meses de este año se alcanza la cifra de 10 mil 623.27 millones de dólares, que en términos anuales significó un avance de 13.04%, contra los 9 mil 397.71 millones que se recibieron en el mismo lapso de 2020.
Aunque se puede pensar que una suma considerable de remesas es buena para la economía, la realidad es que sí, más dólares fortalecen el sistema financiero, pero deja entrever una debilidad en las políticas públicas para generar confianza en la producción, en los medios internos de generación de empleo y una alejada situación de bienestar para las familias que deciden abandonar su lugar de origen.
Durante la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador se han incrementado los montos de las remesas, un escenario que muestra que la migración se ha intensificado en busca de mejores condiciones de vida.
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