Tras la entrada en vigor de la reforma que prohíbe la subcontratación en el país, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que prepara una estrategia para otorgar empleos de base y así terminar con esa práctica dentro del servicio público.
Al ser cuestionado acerca de la situación de outsourcing de los Servidores de la Nación, los “piperos” que laboran en el Gas Bienestar y los profesores de las Universidades del Bienestar Benito Juárez (UBBJ), el mandatario mencionó que, de manera paulatina, ofrecerá puestos fijos en el sector público.
“Se tiene que ir poco a poco basificando a los trabajadores del sector público, los que están por contratos, los que están como eventuales. Es un plan que tenemos, ya llevamos 400 mil maestros y trabajadores de la educación basificados y lo vamos a hacer con médicos, con enfermeras y trabajadores de la salud”.
Sobre el despido de cientos de maestros en las instituciones educativas Benito Juárez, el presidente aseguró que no se corre a nadie, pero que hablará con la directora general, Raquel Sosa, para atender la situación.
El 1 de septiembre pasado entró en funcionamiento la reforma en materia de subcontratación, la cual prohíbe la transferencia de trabajadores propios hacia otra empresa y establece que las empresas deberán transferir y reconocer como trabajadores propios a todos aquellos trabajadores que realizan actividades principales.
