La Constitución mexicana, en su artículo 134 prohibe que la propaganda gubernamental haga alusión personalizada a los funcionarios públicos.
“La propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan como tales, los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno, deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social”, prevé el texto constitucional.
“En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público”, señala textualmente el penúltimo párrafo del citado articulo constitucional.
Sin embargo, Jesús Robles Maloof, titular de la Unidad de operación Regional y Contraloría Social de la Secretaría de la Función Pública -dependencia encargada de vigilar la actuación de los servidores públicos- pasó por alto lo dispuesto en la Carta Magna.
En la cuenta de la red social Twitter, en la que se ostenta como funcionario de la SFP, publicó diseños en los que se hacía alusión directa al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, y se solicitaba el apoyo a la ciudadanía al mandatario en la lucha contra el robo de hidrocarburos.
La falta le fue señalada por usuarios de redes sociales, ante lo cual el servidor público solamente ironizó con la presencia de la imagen del ex presidente Lázaro Cárdenas del Río en el diseño propagandístico.