Alrededor de 550,000 niños europeos enfrentan dificultades para leer debido a la contaminación acústica, según un informe de la Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA). El organismo llamó este jueves a reducir el ruido tanto en los hogares como en las escuelas.
El estudio, que abarca a los 27 estados miembros de la Unión Europea, así como a Liechtenstein, Noruega y Suiza, estima que al menos una de cada cinco personas en Europa está expuesta a niveles de ruido superiores a los recomendados.
“Más del 20 por ciento de la población de la UE, incluidos los niños, vive en áreas donde los niveles de ruido del tráfico son perjudiciales para la salud”, indicó la EEA. En zonas urbanas, este porcentaje puede llegar hasta el 50 por ciento.
Efectos del ruido en la salud
Vivir en áreas con altos niveles de ruido está relacionado con un mayor riesgo de problemas cardiovasculares y de salud mental, señaló el informe.
Además, la contaminación acústica es uno de los factores ambientales más dañinos para la salud en Europa, solo por detrás de la contaminación del aire.
En menores de 18 años, el ruido puede ocasionar problemas cognitivos y está vinculado a la ansiedad.
La EEA destacó que entre los casos de trastornos de lectura atribuidos al ruido del transporte, el 84 por ciento se debe al tráfico vehicular, especialmente en zonas urbanas. El transporte ferroviario representa el 15 por ciento de los casos y el aéreo, el uno por ciento.
Cada año, casi 60,000 casos de trastornos de conducta se asocian al ruido en los países estudiados.
¿Qué hacer para reducir el ruido?
El informe recomienda reducir el ruido desde la fuente mediante medidas como disminuir los límites de velocidad, controlar el ruido de motores y neumáticos, mejorar el aislamiento en viviendas y escuelas, y crear zonas verdes de amortiguación.
“Reducir la exposición tanto en el hogar como en las escuelas minimizaría estos efectos adversos en los niños, mejorando sus oportunidades de vida y calidad de vida”, concluyó la EEA.
Fuente: Agence France-Presse