La Comisión Federal de Electricidad ha tenido que pagar 14 mil 260 millones 737 mil pesos a empresas que construyeron gasoductos y transportan gas para centrales de generación de electricidad aunque no se haya generado un solo kilowatt a partir de dicho suministro.
La Auditoría Superior de la Federación realizó una revisión al servicio de transporte de gas natural contratado por la CFE durante los años 2017 y 2018. En total revisó la operación de 24 gasoductos, 12 en 2017 y otros 12 en 2018.
La ASF identificó que de los 24 gasoductos, al cierre de la auditoría solo hubo 3 que se encontraban terminados con suministro de gas para centrales de generación de la CFE, por los cuales se hicieron pagos por 2 mil 253 millones de pesos.
En contraste hubo 21 gasoductos, con pagos por 14 mil millones de pesos por los que “la CFE no ha recibido beneficio por su construcción”.
Las razones para que la CFE realizara estos pagos por un servicio que no pudo aprovechar son variadas.
Los contratos con los constructores de los gasoductos establecen que se harán cobros por dos conceptos: un cargo fijo al transportista de gas “por tener capacidad reservada de gas natural disponible” para la CFE y un cargo variable en proporción al volumen de gas transportado a la CFE.
La CFE no estuvo en capacidad de usar el gas natural reservado por el proveedor pues en varios casos el gasoducto llegaba a una central de generación eléctrica que no existía, ni siquiera estaba en proceso de licitación.
Se trata de 6 gasoductos, por los que hubo que pagar 5 mil 518 millones de pesos que “corresponden a centrales eléctricas que no se han licitado, y representan erogaciones que se realizarán durante los próximos 25 años por montos similares”.
En otros casos las centrales eléctricas ya estaban construidas pero aún en etapa de pruebas.
El pago de 8 mil 741 millones de pesos se efectuó por 15 gasoductos que “corresponden a puntos de entrega que se encuentran terminados sin operar o en mantenimiento, en proceso de construcción o
pruebas de gas y gasoductos de interconexión en caso fortuito, que se pondrán en operación en un futuro próximo”, revela la ASF.
En el caso del Gasoducto Morelos, la CFE reportó que “está terminado sin que suministre gas al punto de entrega (C.C.C. Centro) toda vez que no ha entrado en operación debido a que no se permite su conexión al canal de aguas residuales por parte de los ejidatarios de la región, sin que
genere valor a la CFE”.
El costo de construcción de la Central de Ciclo Combinado Centro fue de 11 mil 723 millones de pesos y ” generó gastos de operación por 140 millones 494 mil pesos durante 2018″, reportó la CFE.