Si te estás preguntando: ¿necesito un aval para rentar? La respuesta es sí.
Al alquilar una propiedad, uno de los principales requisitos que solicitan las inmobiliarias o arrendadores es a una persona que respalde la operación.
Sin embargo, no todos cuentan con un aval para renta, entonces, ¿qué hacer si no tengo el aval para rentar?
Leonardo González, analista Real Estate de Propiedades.com señala que “el aval es una figura legal que funge como garantía en caso de que el inquilino no pueda pagar la renta acordada previamente en el contrato de arrendamiento.
Aunque este término puede confundirse con fiador, es importante conocer la diferencia”.
La Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito contempla la noción de aval, la cual es mercantil.
Por otro lado, el título de fiador está regulado por el Código Civil y da una fianza como seguro para el propietario.
¿Por qué piden aval para rentar?
El aval para renta lo piden, pues es una manera que utiliza el arrendador para protegerse de posibles adeudos por parte del arrendatario.
La persona designada como aval será la encargada de dar seguimiento y cumplimiento a las obligaciones del arrendatario.
Aunque es un requisito altamente solicitado por inmobiliarias o arrendadores independientes, existen varias posibilidades para renta sin aval.
¿Qué hacer si no tengo aval para renta?
De acuerdo con Propiedades.com, existen algunas opciones para lidiar con el problema de no tener aval. Éstas son algunas:
- Renta sin aval con Arrendavit
Arrendavit, una alternativa de Infonavit, es una de las opciones para renta sin aval. Sin embargo, es importante considerar que para conseguir este apoyo de Infonavit hay que cumplir algunos requisitos:
- Garantía, que es el monto de la subcuenta del solicitante. Ésta deberá ser mayor a 6 meses de renta
- Precio del alquiler mensual, el cual no debe superar el 25% del salario
- Plazo mínimo de tu contrato, que debe ser por 12 meses mínimo
- Aval bancario
Si el interesado en rentar no tiene subcuenta de Infonavit o no la tiene activa, puede solicitar que su banco sea el aval. La entidad financiera realizará un estudio para confirmar la capacidad de pago del usuario.
Leonardo González, analista Real Estate de Propiedades.com, indica que esta opción es conveniente, pues una entidad bancaria ofrece garantías por diferendo de pago. Esto permite tener un contrato de alquiler en forma.
“Muchas veces esto no es opcional, sino que es un requisito obligatorio para proceder a contratar el inmueble. Las garantías también fungen como un depósito, en caso de que los pagos mensuales no se realicen durante un plazo preestablecido”, afirma el especialista.
- Póliza o fianza de arrendamiento
Esta es otra de las opciones para rentar sin aval. Dicha póliza se solicita con una empresa afianzadora para que cubra los gastos de alquiler, en caso de que el inquilino no pueda. Con este instrumento, el arrendador protege su patrimonio.
Antes de elegir una empresa es importante consultar si está autorizada por la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas. Para consolidar la contratación, el interesado deberá cubrir el costo de la fianza, que dependerá del valor de la renta mensual y corresponderá a cierto porcentaje. Al igual que otros gastos como:
- Prima base
- Investigación de inmueble
- Pago de derechos
- Investigación en buró de crédito