La madrugada de este miércoles, una toma clandestina en un ducto de Pemex, ubicado en la parte posterior del fraccionamiento San Gil, provocó una fuga de hidrocarburos que movilizó a servicios de emergencia de San Juan del Río.
Ante la situación, cerca de 70 familias de las comunidades de San Gil y San Germán fueron evacuadas temporalmente como medida preventiva.
El incidente fue reportado al número de emergencias debido a un fuerte olor a combustible en la zona. De inmediato, personal de Protección Civil, bomberos, y trabajadores de Pemex se trasladaron al lugar para contener la fuga, la cual fue causada por la perforación del ducto por presuntos huachicoleros.
Las maniobras de contención se realizaron una vez cerradas las válvulas del ducto afectado, con el apoyo del ejército mexicano.
La baja temperatura en la zona contribuyó a la condensación de vapores, lo que aumentó el riesgo de explosiones. Por este motivo, se cortó el suministro de energía eléctrica en la zona para garantizar la seguridad de los residentes.
Las autoridades continúan monitoreando la situación para prevenir cualquier riesgo adicional, mientras se realizan los trabajos necesarios para reparar el ducto afectado.
Las familias evacuadas ya han comenzado a regresar a sus hogares, una vez que las condiciones de seguridad fueron restablecidas.
