Del 10 al 14 de mayo se podrán observar las auroras boreales, un fenómeno que solo es observable en ciertas partes de la Tierra.
En los últimos días en el país y en ciertas regiones del planeta se han podido observar auroras boreales, un fenómeno derivado por efectos del sol y que usualmente sucede en las zonas altas del planeta como Noruega, Finlandia, Islandia, así como en el Polo Norte.
Este fenómeno ha sido visible en zonas inesperadas como las islas Canarias e España, en Reino Unido, así como en ciudades de Estados Unidos como Los Ángeles o Chicago, al igual que en ciertas regiones del país.
Qué son las auroras boreales y cómo se producen
Las auroras boreales o aurora polar es un fenómeno observable en el cielo nocturno que se desarrolla generalmente en las zonas polares. Las auroras son el resultado de perturbaciones en la magnetosfera de la Tierra (una capa formada por la interacción del magnetismo de la Tierra y el viento solar) causadas por el viento solar. Las auroras boreales suceden en el hemisferio norte, mientas que las auroras australes en el hemisferio sur.
El astrónomo Galileo Galileo acuño el término ‘aurora’ en 1619 en honor a la diosa romana del amanecer, donde creía que se trataba de un reflejo de la luz solar en la atmósfera.
Las auroras boreales y las australes se deben a la interacción de los gases atmosféricos de la tierra con el viento solar, una corriente de partículas cargadas eléctricamente llamadas iones, las cuales salen disparadas del sol en todas direcciones.
Cuando el viento solar toca la Tierra, choca contra el campo magnético del planeta, lo que produce corrientes de partículas cargadas que fluyen hacia los polos. Algunos de estos iones quedan atrapados en la capa de la atmósfera llamada ionosfera, donde chocan con átomos de gas (como el nitrógeno y el oxígeno) y los elevan con energía extra. Esta energía es liberada a manera de partículas de luz o fotones.
Efectos de una tormenta geomagnética
La posibilidad de observar estas auroras boreales “atípicas” se deben a una serie de erupciones solares que han generado una tormenta geomagnética severa, dicho por el Servicio Metereológico Nacional de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés).
Una tormenta geomagnética o tormenta solar es una perturbación temporal de la magnetósfera de la tierra que puede ser causada por una onda de choque de viento solar o una eyección de masa coronal (una onda hecha de radiación y viento solar) que interactúa con el campo magnético terrestre.
Las tormentas geomagnéticas pueden tener impacto en la infraestructura orbital terrestre y en la superficie de la Tierra, donde puede interferir en las comunicaciones, la red eléctrica, la navegación y las operaciones de radio y satélites.
Aunque pueden esperarse algunas interferencias leves y empórales en los sistemas de comunicaciones, no se prevén consecuencias graves, de igual manera, no se ha comprobado que tengan algún efecto en los seres vivos.
En estados como Baja California las auroras boreales serán visibles, mientras en estados como Chihuahua, Durango, Coahuila, Sinaloa, Zacatecas y Nuevo León podrán ser visibles y se podrá disfrutar de esta experiencia.
Aurora boreal vista desde Zacatecas. Fuente: X.
