Cinco elementos de la policía federal torturaron en Acapulco, Guerrero, a un hombre y a su novia, tras capturarlos al salir de un comercio la madrugada del 21 de abril de 2014.
De acuerdo con los hechos relatados por las víctimas a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, fueron detenidos por los elementos federales pasada la media noche sobre la Costera Miguel Alemán.
De forma violenta los obligaron a abordar una camioneta en la que los agredieron físicamente mientras daban vueltas por la ciudad costera.
Fueron llevados a una casa donde el hombre fue torturado y amenazado de que abusarían sexualmente de su novia, al tiempo de solicitarle un millón de dólares para dejarlos en libertad.
Los agentes federales, al no recibir el dinero que exigían, trasladaron a las víctimas a la Ciudad de México, donde los pusieron a disposición de la SEIDO por la presunta comisión de delitos de delincuencia organizada, delitos contra la salud y portación de armas de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea.
La mujer fue liberada en las inmediaciones de la Central de Autobuses del Norte hasta las 2:30 horas del 22 de abril, amenazada por los federales de “no pisar un juzgado” porque ya sabían dónde trabajaba y dónde vivía.
El hombre fue procesado en un jugado, se le dictó auto de formal prisión el 29 de abril; tras tres años de litigios en contra resoluciones de la entonces Procuraduría General de la República, de juzgados y tribunales y federales, obtuvo resolución favorable de un amparo el 18 de agosto de 2018.
Al conocer de los hechos por escritos de queja presentados por las víctimas, la CNDH realizó una investigación y determinó que se cometieron detenciones arbitrarias, actos de tortura y violaciones a los derechos humanos de las víctimas por dilación en el acceso a la justicia.
Por ello emitió recomendación al Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana y a la Fiscalía General de la República para que se proceda a la reparación del daño de las víctimas “en términos de la Ley General de Víctimas y se les brinde atención psicológica”.
También se solicita que se de seguimiento a los juicios contra los elementos policiacos acusados de cometer actos de tortura.
