El Vicario General y Vocero de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, condenó los recientes ataques armados, especialmente el ocurrido en el bar Los Cantaritos, que dejó víctimas mortales el pasado fin de semana.
Lara Becerril subrayó que México enfrenta una grave ola de violencia y que Querétaro no es ajeno a esta realidad.
“Queremos expresar nuestras condolencias a las familias de las víctimas y nuestra cercanía con los heridos. Desde que supimos la noticia, hemos orado por ellos y por su descanso”, afirmó.
Durante las Misas del domingo, las comunidades parroquiales se unieron en oración por los afectados.
El Vicario manifestó confianza en que las autoridades esclarezcan los hechos y lleven a los responsables ante la justicia, señalando que, aunque se mencionó que el ataque iba dirigido a objetivos específicos, hubo víctimas inocentes.
“Derramar sangre inocente es atroz para una sociedad. Confiamos en que se restablezca la seguridad y la paz en nuestra ciudad”, indicó.
Finalmente, hizo un llamado a la sociedad a promover la paz desde acciones individuales y colectivas, fortalecer la cultura de la denuncia y fomentar la paz como un valor esencial desde la familia.