La Fiscalía General del Estado (FGE) dio a conocer que hasta el miércoles por la noche se recibió la denuncia por parte del cuidador de Athos y Tango, los perros rescatistas que habrían muerto envenenados en Querétaro, con lo que se inició la investigación correspondiente.
En atención a la denuncia la madrugada de este viernes se realizó un acto de investigación de cateo en la colonia Panamericano, en la capital del estado.
Se recabaron indicios sobre el hecho y datos de identificación del posible imputado, quien no se encontraba en el domicilio.
La muerte de los caninos ocurrió el domingo 13 de junio.