La Confederación Patronal de la República Mexicana consideró que, sin una reforma total al sistema penitenciario, la Ley de Amnistía es un esfuerzo incompleto, superficial y aislado, con el cual los beneficiarios serán solamente algunos cientos de personas.
Coparmex señaló que la Amnistía es incompleta porque “no se acompaña con un plan de reinserción social para los delincuentes sentenciados que sean liberados”.
Para Coparmex, la ley fue aprobada en el Senado “fast track” bajo presión del Ejecutivo “bajo el falso pretexto de frenar la propagación del coronavirus COVID-19 en los centros penitenciarios”.
Sin embargo, para el sindicato patronal el argumento de la emergencia sanitaria “es una falacia” por los tiempos que la Ley establece para su implementación.
Para el organismo empresarial hay ya mecanismos en la ley para otorgar perdón a personas que, por su situación cultural, familiar o de pobreza, hayan sido sujetos de una injusticia por los tribunales; sin embargo, consideran “el presidente López Obrador rehúye su responsabilidad personal de asumir el costo político por dicha acción”.