La Coordinación de Protección Civil de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) instauró un protocolo y una encuesta para monitorear a la comunidad universitaria que asiste de forma presencial a las oficinas y laboratorios de esta Casa de Estudios, a fin de determinar la vulnerabilidad de sus administrativos al contagio de COVID-19 y evitar que población de riesgo acuda a las instalaciones.
La rectora Teresa García Gasca manifestó que a la fecha se ha aplicado la encuesta a 442 personas de 18 a 70 años, de las cuales 59 por ciento son del género femenino y 41 por ciento del género masculino. Además del estado nutricional de los trabajadores, se mide su tensión arterial, la glucosa capilar, oximetría y temperatura.
“Con la encuesta hemos detectado alrededor de 60 o 70 personas que presentan alteración en tensión arterial o glucosa y de inmediato son referidos al programa Su Salud para que obtengan atención médica correspondiente.
“Entre los padecimientos que hemos detectado están la hipertensión con 10.4 por ciento, diabetes mellitus con el 4.3%, y luego siguen colitis, gastritis, hipertiroidismo e hipotiroidismo. Este trabajo se está efectuando para que no haya personas de riesgo acudiendo a las oficinas de manera presencial. Estamos cuidando a nuestra comunidad universitaria, pues queremos evitar una situación grave de contagio”, expresó la rectora.
“El 78 por ciento de las personas monitoreadas no refieren padecimientos. De lo que se obtiene que el 89 por ciento de esta población es de baja vulnerabilidad, el 10 por ciento de vulnerabilidad media, y el 0.6 por ciento de alta vulnerabilidad”, agregó.
A través de la encuesta también se determinan las alergias de la población, algo determinante para el tema de la vacunación. A través del seguimiento se ha determinado que el 78 por ciento de las personas observadas no refieren tener alergias.