El Departamento de Justicia de Estados Unidos informó el hallazgo de documentos clasificados de la Casa Blanca al interior de la mansión de Donald Trump, ubicada en Palm Beach, Florida y allanada por el FBI el pasado lunes.
Tras la revisión del inmueble, agente federales encontraron 11 conjuntos de documentos oficiales, algunos marcados incluso como ultrasecretos, por lo cual el expresidente podría ser acusado de violaciones a la Ley de Espionaje, además de obstrucción de la justicia y destrucción de registros del gobierno federal.
La Ley de Espionaje prohíbe la retención no autorizada de información de seguridad nacional que podría dañar a Estados Unidos o ayudar a un adversario. Los otros estatutos determinan como delito destruir u ocultar documentos para obstruir una investigación gubernamental, además de la sustracción ilegal de documentos gubernamentales en general.
La condena por violar la Ley de Espionaje tiene una pena máxima de 10 años en una prisión federal y el estatuto de obstrucción de justicia, tiene una pena máxima de 20 años, mientras que la destrucción de registros terminaría con las aspiraciones presidenciales de Trump, ya que le prohibiría ocupar cualquier cargo en el gobierno.
Esta polémica se suma a la de la Organización Trump y su director financiero, Allen Weisselberg, quien irá a juicio el 24 de octubre por cargos de fraude fiscal.