El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió que la guerra provocada por Rusia pondría en peligro la seguridad alimentaria del mundo. De acuerdo con un informe del organismo publicado este lunes, a tres semanas del inicio del conflicto armado, se han disparado los precios de los energéticos y de las materias primas, incluidas las del sector agrícola.
Ucrania se encuentran entre los principales productores de trigo en el mundo, entre ambos concentran un tercio del comercio global de este cereal, y la interrupción de sus exportaciones tendrá efectos inmediatos en países dependientes del trigo.
Túnez, Egipto y Líbano, cuyas importaciones del grano son de 80, 70 y 60 por ciento respectivamente, serían de los países más afectados. Afganistán, Etiopía, Siria y Yemen también se verían fuertemente golpeados por la escasez y alto precio del trigo, el cual ha aumentado hasta 35 por ciento desde que las fuerzas armadas rusas invadieron Ucrania.
En ese tenor, el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, alertó que la guerra podría resultar en “un huracán de hambruna” en muchos países.
Señaló que la detención de la producción agrícola en Ucrania y Rusia golpeará más duramente a los países pobres y podría provocar el colapso del sistema alimentario global, generando inestabilidad política y malestar en todo el mundo.