Un hombre hirió de gravedad con un cuchillo a ocho personas este jueves, entre ellas ocho menores de edad, en un parque de Annecy, en Francia, cerca de la frontera con Suiza.
De acuerdo con informes policiales, hay seis víctimas graves, cuatro de ellas niños de entre 22 meses y tres años de edad. Dos de los menores y un adulto fueron heridos de gravedad y su vida corre peligro.
Entre las víctimas menores de edad, hay dos hermanos franceses, un alemán y un inglés. El adulto herido de gravedad es un anciano de 78 años.
“El individuo ha sido detenido gracias a una rápida intervención de las fuerzas de seguridad”, aseguró en Twitter el ministro francés del Interior, Gérald Darmanin.
¿Quién es el agresor?
Los primeros informes de la policía refieren que el agresor, quien es interrogado para conocer los motivos del ataque, es un refugiado sirio en Suecia desde 2013, de 31 años de edad, identificado como Abdalmasih H.
El presunto agresor habría gritado dos veces “en el nombre de Jesucristo”, en inglés, cuando atacó a las víctimas, según un vídeo difundido por redes sociales. Sin embargo, la Fiscalía ha descartado por ahora un móvil terrorista y el caso está siendo investigado como intento de asesinato.
El hombre llevaba consigo una cruz cristiana cuando fue detenido por los agentes y se había presentado como un “cristiano de Siria” cuando solicitó asilo en la Oficina Francesa para la Protección de los Refugiados (OFPRA) el 28 de noviembre de 2022.
El sujeto está casado con una ciudadana sueca con la que tiene un hijo de tres años, según fuentes policiales. El atacante no tiene antecedentes policiales ni tenía precedentes conocidos de problemas de salud mental.
Francia en estado de shock
“Ataque de absoluta cobardía esta mañana en un parque de Annecy. Los niños y un adulto están entre la vida y la muerte. La Nación está en estado de shock. Nuestros pensamientos están con ellos, sus familias y los servicios de emergencia movilizados”, señaló en Twitter el presidente de Francia Emmanuel Macron.
A través de Twitter, el expresidente de Francia, Nicolas Sarkozy, calificó el hecho como “un acto tan indescriptible como imperdonable en Annecy. Mis más cálidos pensamientos están con las víctimas y sus seres queridos. Francia está molesta porque podemos atacar a los más frágiles de sus niños”.
