Es considerado uno de los grandes clásicos de la ciencia ficción y sería difícil imaginar el cine sin su presencia ni su influencia… El planeta de los simios, de 1968.
Como otros famosos proyectos, el filme no fue aprobado de inmediato e incluso el actor principal, Charlton Heston creyó que no se realizaría, ya que pasó mucho tiempo atorado.
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La historia está basada muy parcialmente en la novela de Pierre Boulle, de 1963. Los derechos para llevarla al cine se compraron antes de que estuviera terminada. Esta práctica, que puede parecer poco usual, en realidad se ha realizado en varias ocasiones, como con la novela y eventual producción del filme Psycho, de 1960, de Hitchcock.
El 3 de abril de 1968, tuvo su estreno en Estados Unidos; poco tiempo después, Planet of the Apes se convirtió en una de las primeras franquicias millonarias del medio. No solo eso, también fue pionera en la comercialización de todo tipo de mercancía.
Asimismo, Planet of the Apes otorgó una licencia para la creación de una revista a cargo de Marvel Comics, que inició publicación en 1974 y que contó con talentos como los escritores Gerry Conway y Doug Moench y artistas como Mike Ploog. Para ese año, ya era una propiedad bastante exitosa y redituable.
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Sin embargo, la luz verde tardó en llegar para la producción del primer filme. El género de ciencia ficción no estaba lo suficientemente acreditado en cine y sus presupuestos podían ser muy exigentes. Afortunadamente, todo se alineó para que fuera filmada.
La premisa es bastante conocida, así como el sorprendente final y es uno de los obligados del cine que se sigue manteniendo en buena forma. Para ello, contribuyen en gran medida las actuaciones y la producción, así como el estupendo trabajo de maquillaje.
La dirección de Franklin J. Schaffner tiene muchos movimientos de cámara, ya sea de manera física o con las lentes; las cámaras al hombro son caóticas y tienen el propósito de desconcertar al espectador para transmitir un poco de lo que el protagonista siente.
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El filme inicia con el astronauta de apellido Taylor (en los créditos se le da el nombre de George, aunque en el filme nunca se menciona), interpretado por Heston, quien graba anotaciones en la bitácora de vuelo dentro su transbordador espacial. El científico está a punto de criogenizarse en lo que es el último punto de su misión antes de regresar a la Tierra. Sus demás compañeros ya se encuentran en animación suspendida.
La expedición de Taylor y sus tres tripulantes les ha llevado tan solo 6 meses de viaje; sin embargo, en su planeta de origen habrán pasado cerca de 700 años. Por lo tanto, los astronautas no saben qué encontrarán a su regreso. Ciertamente, toda la gente que conocían habrá desaparecido.
Para mala fortuna, una falla en la nave provoca que los astronautas de la NASA se desvíen de su curso, errando por 2000 años.
Además, la cámara criogénica de la única mujer abordo, Stewart, se avería permitiendo dejar entrar el aire por lo que la mujer envejece, muere y es momificada mientras duerme. De esto se percatan los tres hombres que despiertan para horrorizarse ante el descubrimiento de la garrafal falla técnica.
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El aterrizaje de la nave se realiza en el mar, cerca de una costa, lo que les permite llegar a tierra firme, pese a la irremediable pérdida de su trasbordador. Con unas pocas provisiones, los astronautas se dan a la exploración del lugar.
No pasa mucho tiempo antes de que descubran las condiciones de un planeta habitable… y habitado. El trío de sobrevivientes encuentra a una tribu de hombres primitivos. Pero antes de que puedan intentar entablar comunicación con ellos, son emboscados por simios con armadura, con armas y que montan a caballo.
Taylor es llevado preso y enjaulado junto con otros cavernícolas. En una mala coincidencia, el hombre ha sido herido de bala en la garganta, lo que ha lastimado sus cuerdas vocales y le impide hablar; solamente es capaz de emitir sonidos guturales como el resto de los hombres primitivos.
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El planeta de los simios es una alegoría del actuar del ser humano, de la soberbia como especie y de lo poco humano que puede llegar a ser cuando se trata de vidas que considera “inferiores”, tan solo por su incapacidad para comprenderlas o de comunicarse con ellas.
Taylor intenta demostrar que es un ser inteligente y de ciencia. De hecho, la ciencia dominada por el astronauta es más desarrollada que la de los simios, quienes aún consideran el hecho de volar artificialmente, algo imposible. Por el contrario, han logrado establecer una sociedad funcional, jerárquica y con creencias.
Aún con hechos que prueban la veracidad de sus argumentos, Taylor es denostado e insultado, equiparado a una “bestia”, sin alma ni razonamiento. Sin que tenga la opción de defenderse, es sentenciado a ser un experimento científico, por ser considerado un ser “mutante” de entre los de su especie. Taylor debe usar la inteligencia para escapar del lugar.
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Si te has preguntado alguna vez por qué Planet of the Apes es una marca de cine tan famosa, basta con solo ver esta producción. En 2023 se cumplen 55 años de su estreno.
Y para despedirme por esta ocasión, te presento la liga para una nota donde hablo acerca de filmes que cumplieron 50 años en 2021, entre ellas, la tercera entrega de esta franquicia y que lleva por título, Escape del planeta de los simios, así como otras películas, del tipo de Shaft, Dirty Harry y Diamonds Are Forever, en el serial de James Bond:
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Y te ofrezco la liga para el filme de Kubrick, 2001, Odisea del espacio:
