Tal vez habría tenido mucha más atención si le hubieran titulado, El Resplandor 2. Doctor Sleep, es la estupenda secuela que no esperábamos.
The Shining.
Es bien sabido que al creador de The Shining, o El resplandor, Stephen King, no le agradó la adaptación fílmica de Stanley Kubrick de 1980. Y tiene sus buenos motivos, pues el cineasta modificó considerablemente la obra para poder mostrar su propia visión, sacrificando importantes elementos de la novela.
Por ejemplo, en el libro, Jack Torrance (interpretado magistralmente por Jack Nicholson), es una persona trastornada desde el inicio, contrariamente a como lo muestra la película.
El problema más grande de Jack, es el alcoholismo, enfermedad que lo coloca en un mundo ordinario, tal como lo es este en el que vivimos. El alcohol puede ser un monstruo destructor; esa es una alegoría que utiliza el autor y que es pasada por alto en la cinta. Los monstruos son más reales y están más cerca de lo que creemos.
Son esos mismos fantasmas los que persiguen a Danny durante toda su vida.
Doctor Sleep.
El final del filme de 1980 cambia considerablemente y se convierte en una de las fortalezas de la secuela que se dio a conocer en 2019, cuya base literaria es Doctor Sleep, de 2013.
Doctor Sueño, el libro que narra la vida del hijo de Jack, no es acerca de heroísmo, sino de sobrevivencia. Danny es una persona que ha perdido su camino. O, mejor dicho, nunca lo ha encontrado. Torrance tampoco es una víctima, es una persona que elige evadir su realidad, rendirse ante sus demonios.
Danny ha pasado tanto tiempo repeliendo a los muertos, que no ha aprendido a vivir.
La adaptación de cine, Doctor Sleep, dirigida por Mike Flanagan, no solo respeta la novela de King, sino que rinde tributo a la película de Kubrick y crea una amalgama perfectamente orgánica.
La película del 2019, se destaca en cada uno de sus elementos y es una muy buena adaptación de un libro de King, haciéndolo más digerible. Los fanáticos del escritor de Maine saben perfectamente a qué me refiero.
La estética y la narrativa son primordiales para Flanagan y con eso se abre paso para crear su propuesta. Asimismo, el director explota al máximo a su elenco y demuestra que conoce y aprecia la obra que está adaptando.
Cuando el destino llama.
Ewan McGregor interpreta a Danny Torrance, que dista mucho de ser un salvador; es un ser humano fallido y que logra su redención involuntaria, al involucrarse en la vida de Abra Stone (Kyliegh Curran), una pequeña niña que logra entablar comunicación con él por medio de el resplandor, un poder mental que poseen todos los seres humanos.
En algunas personas, el resplandor se desarrolla en mayor medida. En el caso de Abra, la hace muy poderosa y a la vez, susceptible de ataques de una horda de metafóricos vampiros, The True Knot (El Grupo Verdadero), que han tenido una extremada larga vida al alimentarse de esa misma energía.
Cuando los villanos, liderados por Rose the Hat (Rebecca Ferguson), descubren la enorme energía de Abra, la buscan para alimentarse de ella. Lo que aún no saben, es que Abra les hará ver su suerte.
Abra entabla comunicación telepática con Danny para pedirle ayuda. Inicialmente, Torrance intenta evitar involucrarse, mas el bienestar de la pequeña le hace cambiar de parecer. Lo que sigue, es una guerra campal.
Flanagan consigue maniobrar con todos los elementos y personajes, los temas y sus referencias. El tercer acto es un regreso pleno a The Shining y al hotel Overlook, que es manejado como en su obra base, una entidad maligna con vida propia y un poderoso nexo entre los vivos y los muertos.
Desde los temas musicales hasta las alfombras del Overlook, nos remiten directamente a The Shining de Kubrick, no solo al de King, cumpliendo plenamente con la narración. Ah, tampoco faltan las importantes calderas que son el núcleo y el perverso ígneo corazón del hotel.
Se cumplen 5 años de la película, Doctor Sleep.
Te ofrezco la nota donde recordamos El resplandor, de Kubrick:
Y otro vistazo a Doctor Sleep: