La dama en el agua, de 2006. El arte del autodescubrimiento.
Descubrir quiénes somos, es un trabajo en proceso. La dama en el agua, de 2006, es una fábula que plantea ese argumento por medio de una intrigante historia.

Lady in the Water, 2006.
Las películas se cuentan de muchas maneras y dependen de muchos factores. El director es un elemento fundamental. En el caso de M. Night Shyamalan, además de dirigir y producir, también aporta el guion. Asimismo, el cineasta interpreta uno de los papeles importantes en el filme, el de uno de los inquilinos, Vick Ran, hermano de Anna (Sarita Choudhury).
El hecho de haber elegido actuar también, le ganó críticas a Shyamalan, y descalificación a su película. Mas con el paso del tiempo, las malas anotaciones se han suavizado y la producción se aprecia de distinta manera.
Otro hecho a considerar, es que desde su éxito con El sexto sentido (The Sixth Sense), de 1999, Shyamalan ha competido, principalmente, contra sí mismo. Y es que dicha cinta continúa siendo un referente importante en la historia del cine.
Aun así, Lady in the Water es una estupenda propuesta y muy diferente a la que vimos con Bruce Willis como protagonista. El director nacido en India y nacionalizado estadounidense, tiene distintos tipos de relatos y se maneja en géneros diferentes.
En La dama en el agua, Shyamalan nos propone una película que es un cuento para dormir, lo cual se nos reitera una y otra vez a lo largo del filme.
La historia.
El superintendente Cleveland Heep (Paul Giamatti), quien se hace cargo de un conjunto de modestos departamentos, intenta descubrir a quien se mete a la alberca por las noches, lo cual no está permitido. Una noche, alcanza a ver a una persona que emerge de la piscina. Intentando atraparla, resbala, cae y se golpea la cabeza, perdiendo el conocimiento.
Al despertar, Heep se encuentra en su departamento y una bella mujer lo vigila desde un sillón. Es ella quien le ha salvado y también quien ha usado la alberca clandestinamente.
La hermosa joven pertenece a un reino mágico de seres que han vivido bajo el agua por siglos. Durante algún tiempo, compartieron con aquellos que vivían en tierra, mas la necedad y ambición de los segundos, los hizo separarse.
Story (Bryce Dallas Howard), es una ninfa acuática, conocida como Narf en algunas culturas, y debe cumplir una misión para poder regresar a casa. Sin embargo, Story no tiene claro de qué trata dicha misión y ni siquiera su rol en ella. Cleveland decide ayudarla, sin saber que en el camino encontrará su propio propósito en la vida.
Pero hay un gran problema, Story es acechada por un feroz y mortal depredador, similar a un enorme lobo, conformado por lo que parecen ser ramas y hojas de árboles. El místico animal no cederá hasta acabar con su vida.
Para ayudar a Story, Heep debe reunir a un grupo de personas que cumpla una función en específico. Este grupo, sin embargo, es más una colección de parias. Todos ellos, residentes del conjunto. Otro problema es que muchos de ellos se encuentran ahí para huir de algo.
Los elementos.
Lady in the Water, es un filme que aborda el tema del autodescubrimiento y nos recuerda que, aunque vayamos en pleno camino, es posible rectificar. A veces, no somos lo que creemos y es entonces cuando tenemos que encontrar nuestro verdadero rol, nuestra propia voz y hasta un nuevo propósito en la vida. para ello, tenemos que preguntarnos si estamos huyendo de nosotros mismos.
La realización del filme parece muy sencilla. Si bien la construcción del enorme set resultó ser oneroso, la narración podría parecer más servicial que estética. Y esto sirve un propósito, pues nos genera una sensación de realismo y otra, de una casi imperceptible inquietud.
Las cámaras son imprecisas y parecen casi aficionadas. Algunos planos están cortados y los actores no llegan a una marca donde se les pueda apreciar bien. No hay una gran armonía visual. Muchas tomas son cerradas, en el plano conocido como medium shot. Todo esto tiene una razón de ser.
Varias secuencias son simples y carecen de intercortes que nos permitan observar las reacciones de los actores, lo cual crea escenas más largas y con poca estética. La intención es trasladar momentáneamente al espectador a ese lugar donde podría ser uno de los residentes, tal como si fuera partícipe activo de las discusiones.
La fotografía de Christopher Doyle ayuda para alcanzar este fin, pues también sirve a la historia y lo hace sin lucimientos. La iluminación es plana, sin resaltes y ocasionalmente es por medio del foco de la cámara que se llegan a manejar las profundidades.
Las condiciones anteriores nos ayudan cuando se nos vende la idea de una historia fantástica enclavada en un mundo real.
Por su lado, la música de James Newton Howard es digna de disfrutarse, ya sea a través del filme o de manera individual, en algún servicio de streaming.
La dama en el agua, o Lady in the Water, es un filme que hay que ver con otros ojos, con esos que muchas veces tenemos vendados. El estreno se llevó a cabo el 21 de julio de 2006, en los Estados Unidos.
Te presento una nota donde recordamos El sexto sentido:
Y una más, con el final de la saga de Unbreakable:







Comentarios