Para 2004, Jennifer Walters ha pasado por mucho. Por ejemplo, ha destruido a su amigo, Vision. En su nueva serie, She-Hulk se va por lo legal y retoma su vida.
En realidad, She-Hulk no es culpable de la destrucción de Vision (o lo que quedaba de él), pues había sido controlada para… sí… perder el control. La cadena de eventos desafortunados ocurren en el evento Avengers Disassembled y fueron el inicio de un gran cambio para The Avengers.
La nueva serie en comic.
Jen quedó un poco fuera del juego –y de la continuidad de las revistas-, lo cual la liberó para poder tener su propia serie. Un nuevo volumen fue lanzado el 10 de marzo de 2004 y llevó por nombre, simplemente, She-Hulk.
Hemos hablado de la importancia de She-Hulk en los comics de Marvel y de cómo se mantiene como una favorita entre muchos seguidores de la editorial. Es por esta razón que constantemente veremos nuevas series con su nombre en el título.
En 2004, el equipo creativo del escritor Dan Slott, el dibujante Juan Bobillo y el portadista Adi Granov, emprendieron un nuevo rumbo para la prima de Bruce Banner.
Jen Walters y She-Hulk.
Para ese entonces, Jen se encontraba en un buen lugar, había logrado controlar su personalidad gama e incluso podía tomar su forma humana, algo que no hacía, entre otras razones, porque no lo necesitaba. A diferencia de Hulk, Jennifer tenía dominio de su ser; al menos hasta Avengers Disassembled.
El nuevo comic resultó ser un respiro de aire fresco y ayudó a dar dirección al personaje durante los siguientes años. El aspecto legal se volvió importante (Jen es abogada) y las aventuras de She-Hulk eran tanto en el campo de acción como dentro de las cortes. Por ello, el foco de atención también se centró en Jen Walters, la “petite” y feroz litigante.
Esta manera de hacer historias no es tan sencilla, pues se requiere de algún tipo de conocimiento legal de manera general o buscar la asesoría de algún abogado que pueda pensar en las situaciones hipotéticas de un mundo ficticio, como el universo Marvel, pero con base en la realidad.
La voz de Slott.
Dan Slott, quien ya tenía una década haciendo historias, ganó renombre con esta serie. Tiempo después comenzaría una larga asociación con el trepamuros más amigable del vecindario, Spider-Man.
Después de los primeros cuatro números, Bobillo fue sustituido por otro capaz dibujante, Paul Pelletier. El estilo de Bobillo tenía una cualidad inherentemente cómica que sentaba a la perfección con el tono de las historias. Afortunadamente, Bobillo regresó para los números 7 y 8.
En el comic, Walters es contratada por una firma de abogados de apellidos que nos resultan conocidos: Goodman, Lieber, Kurtzberg & Holliway.
Holden Holliway, el socio mayoritario es a quien vemos en la serie. Los demás socios son, por suposición, Martin Goodman (dueño de Marvel desde los años 30 y hasta la década de 1970), Stanley Lieber (Stan Lee) y Jacob Kurtzberg (Jack Kirby).
She-Hulk, con mucha demanda.
Jen Walters es reconocida por ser representante legal de clientes no fáciles de manejar, de la talla de Fantastic Four y The Avengers. Sabemos que estos grupos pueden meterse en toda clase de situaciones bizarras que necesitan salidas legales eficaces y un muy creativo manejo de las leyes.
La serie de She-Hulk se caracterizó por ser ligera y con humor inteligente, además de tener buenos invitados como Spider-Man, Fantastic Four y Doctor Samson, entre otros.
El título llegó a su final con el número 12, publicado el 16 de febrero de 2005.
Más volumen.
Este no fue realmente el final para She-Hulk, ya que el comic fue relanzado con un nuevo volumen a cargo de Slott y de Bobillo (los primeros 3 números y el 5), el 19 de octubre del mismo año. El portadista inicial fue Greg Horn. El volumen alcanzó las 38 ediciones.
Slott se hizo acompañar por los artistas, Scott Kollins, Will Conrad, Paul Smith, Ron Frenz y Rick Burchett. El último número del escritor fue el 21, del 6 de septiembre de 2007 y fue sustituido por otra celebridad del medio, Peter David.
El de She-Hulk, es uno de los comics de calidad consistente de Marvel, si bien no necesariamente se ve reflejado en las ventas.
She-Hulk #1, la primera serie de Slott y Bobillo, cumple 20 años de su estreno.
Te ofrezco una nota de esta gran heroína de Marvel; la de su serie anterior con John Byrne como escritor y dibujante:
