¿Qué es el equilibrio sino una balanza figurada? A la esperanza y al desaliento, los separa un instante. Así lo vivió Superman en “Por el mañana”.
La llegada del dibujante Jim Lee a DC Comics, después de vender su compañía Wildstorm, en 1998, fue uno de los sucesos más sorpendentes en la industria del comic.
De Image a DC Comics.
El cofundador de Image Comics, creó un tumulto cuando anunció la venta de sus personajes a DC, editorial que además lo firmó en exclusiva para que el creativo no pudiera hacer proyecto alguno para Marvel. También se le dio un puesto como alto ejecutivo. Tal era el valor de Jim Lee en el mercado.
Lo que todo mundo quería saber, era cuál sería el primer proyecto ilustrado por Lee, pues nunca había hecho un trabajo profesional para esa compañía más allá de portadas o pinups.
Entonces llegó Batman: Hush, el 23 de octubre de 2002. Este inició en el número 608 de la publicación.
La serie de 12 partes, con el escritor Jeph Loeb, fue todo un éxito en críticas y ventas.
Las armas pesadas de DC.
Un año más tarde, el 24 de noviembre de 2003, Hush culminaba en Batman #619.
¿Y después?
Estratégicamente, DC propuso a otro de sus íconos como el siguiente trabajo de Jim Lee: Superman.
La editorial anunció que la siguiente historia tendría el mismo formato que Hush, una maxiserie de 12 partes que sería parte de una de las revistas mensuales de Superman.
Lee, colaboraría con uno de los escritores preferidos de DC en ese tiempo, Brian Azzarello, conocido por su trabajo en Hellblazer (la revista de Constantine) y como cocreador de 100 Bullets (con el dibujante Eduardo Risso). Ambas publicaciones pertenecen al sello Vertigo, de DC.
Relato de introspección.
Superman #204, por Azzarello y Lee, con su inseparable Scott Williams en las tintas, fue publicado el 28 de abril de 2004.
Hay que mencionar que la narrativa de Superman: For Tomorrow, es consdierablemetne diferente a la de Batman: Hush. Esta última era una película de acción de verano con explosiones y acción al por mayor; un pretexto para que Jim Lee dibujara a cuantos personajes pudiera. Eso es lo que el público deseaba.
Por otra parte, Superman: For Tomorrow, es una historia, sí, espectacular, pero a la vez introspectiva y que analiza el significado de Superman para el mundo y para sí mismo. Es una crisis de identidad que debe superar Kal-El si es que desea continuar con su poderosa misión.
Superman: For Tomorrow no fue tan bien recibida en su momento como Batman: Hush, debido a que su inicio no es explosivo. O, al menos, no lo parecía. Afortunadamente, el tiempo ha ayudado para demostrar su valor dentro de la bibliografía de El Hombre de Acero.
De hecho, partes de este relato se han tomado para otros medios, como la película Man of Steel, dirigida por Scott Snyder y con Henry Cavill como Kal-El/Superman, de 2013.
Superman en “Por el mañana”.
En “Por el mañana”, el mundo tiene claro quién es Superman, pero… ¿él lo tiene claro?
For Tomorrow, es otro tipo de filme, uno de inicio relativamente más lento, que va poniendo una a una las piezas necesarias para arrancar. También se toma su tiempo para mostrar a Superman, aunque no tarda demasiado (lo hace en la página 6). Cuando el héroe aparece, es en un momento de relativa calma, pero lo hace de manera impactante.
El lector se une a la historia a la mitad del juego y se va enterando paulatinamente de los acontecimientos.
La primera página es un vistazo a la ciudad, Metropolis, con una narración que nos lleva por los paneles. En la siguiente página, conocemos a un nuevo personaje, el sacerdote católico, Daniel Leone, quien platica con la teniente, Lupé Leocadio-Escudero (sí, con tilde en la “e”). Ambos hablan de su pasado y de su existencia.
Cuando el clérigo queda solo en su recinto, aparece magistralmente Superman.
Sentimiento de culpa.
Kal-El utiliza el proverbial hombro de Leone para descargar la crisis que lo aqueja. Cuando el mundo se enfrenta a una especie de “arrebato”, en el que gran parte de la población desaparece sin dejar huella, el héroe se encuentra en el espacio.
La culpa por no haber estado en la Tierra para intentar prevenir el evento, consume a Kal-El. Sobre todo porque entre los desaparecidos se encuentra Lois Lane, su esposa.
El primer capítulo es una plática entre ambos hombres en el que vemos algunos recuerdos de Superman. Al final, el desesperanzado héroe, abandona el lugar.
La manera en que Azzarello y Lee plantean este primer episodio es suficiente para cautivar la atención del público.
Lee narra la historia demostrando porqué es uno de los mejores en el negocio. Aún las secuencias de calma, el ilustrador las luce con movimiento, dramática iluminación y cambios de ubicación de cámara, interesantes perspectivas y escenarios. No hay momento estático.
Justicia para todos.
La propuesta es también intrigante. Se conoce a Superman como un personaje físicamente poderoso, pero… ¿cómo se antepone a una crisis de identidad? Por otro lado, ¿qué se necesita para que Superman se convierta en el enemigo?
Lo arriba descrito no implica que ese sea el único tema, pues en, For Tomorrow, vemos todo tipo de conflictos, además de nuevos rivales, como el monstruoso Equus.
Y para dar algo más a los fans, de manera no tan pronta, aparece The Justice League (algo que todo fan de Lee deseaba ver), con Martian Manhunter, Batman, Wonder Woman, The Flash, Green Lantern y Aquaman. Así que Azzarello y Lee también satisfacen a aquellos que desean ver las versiones de Lee a otros héroes.
Ah, por cierto, también podemos ver a unos cuantos clones de Doomsday.
Superman: For Tomorrow, es una buena lectura y su inicio de dio hace 20 años.
Antes de despedirme, te ofrezco otra la nota donde recordamos, Batman: Hush:
Jim Lee en X-Men:
La salida de Lee de Marvel:
Su primer comic de Image, con WildC.A.T.s.:
El encuentro entre The X-Men y WildC.A.T.s.:
Y la fiebre de las tarjetas coleccionables en los noventa, de la cual, Jim Lee fue partícipe:
