X-Men #94, de 1975, es un muy importante suceso del comic. En 1999, con X-Men #94 (volumen 2), Alan Davis hace un tributo al pasado, pensando en el futuro.
El renacer de los mutantes.
El primer volumen de X-Men, inició en 1963 (el mismo día que Avengers #1) y, años después, se convirtió en el comic más vendido de la industria norteamericana. Todo se dio cuando se presentó un nuevo equipo de mutantes, entre los que se cuentan, Wolverine, Storm, Colossus y Nightcrawler. A ellos se les vio por vez primera, en Giant-Size X-Men #1 (Wolverine tenía una aparición previa en el comic de Hulk).
El comic arriba mencionado era una edición especial y, pese a que se programó un número 2, Marvel decidió cancelar ese plan para, en su lugar, reactivar la revista bimestral de X-Men, pues esta presentaba reimpresiones de historias antiguas.
X-Men reinició con el #94, publicado el 10 de junio de 1975. El relato era el que se había preparado para Giant-Size X-Men #2. Como este ya estaba casi terminado, se modificó para ser ofrecido en dos partes. Por cierto, fue en esa edición que al comic se le tituló por vez primera, The Uncanny X-Men, lo cual se puede ver en la primera página.
Dicho comic cambió oficialmente de nombre, de X-Men a The Uncanny X-Men, con la edición número 142.
Problema en el paraíso.
En 1991, se lanzó un segundo comic, llamado simplemente X-Men. El primer número rompió récord de ventas con más de 8 millones de copias vendidas.
Cuando el segundo volumen llegó al número 94, Marvel requería de hacer algo especial, debido a la relevancia de su predecesor.
En ese entonces, las cosas no estaban sencillas en la Oficina X (el departamento editorial y de producción de los comics de mutantes), dado que las decisiones editoriales complicaban las condiciones de trabajo y se coartaba la libertad creativa. El escritor y artista, Alan Davis, había sido llamado para poner algo de orden en los dos comics de X-Men, pues el rumbo se había perdido.
Aun así, las condiciones eran adversas para el creativo, a quien se le contrató básicamente para plasmar las ideas de los editores. Un cambio estructural fue necesario más adelante. La etapa “salvavidas” de Davis, duró poco más de un año. Durante esta, el inglés se apoyó en otros artistas y guionistas, dado que la carga laboral era considerable.
Una de las funciones del inglés, fue poner fin a varios hilos argumentales inconclusos, así como dar proyección hacia el futuro.
Piezas en un rompecabezas.
En cuanto a la historia, los mutantes también estaban en una posición difícil. Su mentor, Charles Xavier, demostraba un cambio en su comportamiento, endureciéndose sin razón y decide poner fin al equipo. Varios de sus integrantes se sienten defraudados por su maestro y buscan una nueva dirección de vida.
En X-Men #93, inicia un relato de dos partes en el que Mystique pide ayuda a Rogue y a Kitty Pryde, mientras que Nightcrawler se reencuentra con Polaris, quien también le pide ayuda. Ambas son perseguidas por distintos asaltantes.
Mesmero y Mastermind buscan capturar a Mystique por órdenes de un tercero. Extraño es el hecho de que Mastermind había muerto tiempo atrás, víctima del Virus del Legado.
Mientras Rogue busca pistas, se topa con el exaliado y exmiembro incómodo de los X-Men, Sunfire (Shiro Yoshida), originario de Japón.
“La caja de Pandora”.
La narración continúa propiamente en X-Men #94, del 22 de septiembre de 1999, escrita e ilustrada por Davis, con tintas de Mark Farmer y guion de Terry Kavanagh, el mismo equipo del número anterior. El relato se subtitula, “La caja de Pandora”.
En esta, Sunfire ataca a Rogue, pensando que es Mystique, a quien busca por homicidio. Shiro no es la persona más ecuánime, por lo que es hasta que Rogue lo somete, que Sunfire acepta su palabra.
Por su parte, Kitty cuida de una herida Mystique y se cuestiona qué tanto saben de Rogue, pues después de varios años aún desconocen su pasado y hasta su nombre real. Cuando acomoda una pintura, accidentalmente descubre un mensaje escrito para ella por Destiny, la mutante precognitiva fallecida años antes y pareja de Mystique.
Destiny, previendo ese momento, deja un diario para que sea encontrado por Kitty, pues una gran crisis se avecina.
“…Aquel que habrá de ser La Muerte”.
Por su parte, Rogue y Sunfire descubren que Mystique ha sido incriminada.
Algo similar sucede con Polaris, quien parece haber perdido la razón después de la aparente muerte de su novio, Havok. Kurt intenta creerle, mas las circunstancias no se prestan. Lorna ha sido manipulada para hacer creer, hasta a su gente más cercana, que ha perdido la razón.
Nadie lo sabe, pero efectivamente, Havok no ha muerto (en el comic X-Factor #149), sino que ha sido transportado a otra dimensión (como se puede ver en el comic, Mutant X).
Tal como las predicciones de Nostradamus, las de Destiny están en clave y no pueden ser fácilmente descifradas. Algunas notas mencionan a “Los 12”, además de traiciones, cráneos extraterrestres y “La muerte”.
Una predicción llama particularmente la atención: “La muerte mata a aquel que habrá de ser la muerte”.
Las profecías de Destiny:
La de, Los 12 (The Twelve), es una historia plantada años antes por Chris Claremont y Louise Simonson, misma que no pudieron concluir y que trata acerca de 12 mutantes destinados a poner fin a Apocalypse.
Los cráneos referidos en la predicción de Destiny (“skulls”, en inglés) no son tales, sino Skrulls, integrantes de una raza alienígena conquistadora que tendrán relevancia unos meses después. Recientemente, los X-Men tuvieron un encuentro con ellos.
El vaticinio acerca de la muerte, se refiere a “Death”, uno de los jinetes de Apocalypse, que también intervendrá, atacará a los mutantes y asesinará a uno de los X-Men. De esto hablaremos después.
De regreso al relato, Sunfire y Rogue, pelean contra Mesmero y Mastermind. Las instalaciones son destruidas y los villanos desparecen, dejando más incógnitas.
Nightcrawler promete ayudar a Lorna y cuando la deja en su departamento, podemos ver que un ser desconocido espía a la mutante.
Rogue se reúne con Kitty y Mystique, pero esta última desaparece. Shadowcat muestra el diario de Destiny a Rogue y le comenta que lo que descubrió es, o totalmente desquiciado o realmente preocupante. Así termina el relato.
X-Men: Hidden Years.
La siguiente historia de X-Men #94, es escrita y dibujada por John Byrne, con tintas de Tom Palmer.
Byrne regresó a los mutantes después de casi 20 años de ausencia, salvo algunas muy breves intervenciones, con el previo de 10 páginas que aparece en X-Men #94 y que es antesala al estreno de su nuevo comic, X-Men: Hidden Years, que comenzó publicación el 10 de octubre de 1999.
Dicho comic llenaba el hueco entre los comics X-Men #66 y X-Men #94 del primer volumen (los números que fueron reimpresiones). En esta etapa aparecía la alineación original: Cyclops, Marvel Girl, Iceman, Beast, Angel y Professor X, además de Havok y Polaris, que fueron adiciones subsecuentes al equipo. De este título también hablaremos en una próxima ocasión.
Por lo pronto, te ofrezco otras notas relacionadas, como el lanzamiento de los nuevos X-Men, de 1975:
Y los números anteriores a esta entrega:
Catwoman: When in Rome, por Loeb y Sale.
Spider-Man se vuelve cósmico.
Acts of Vengeance, de Marvel Comics.
La Saga de Proteus, en X-Men.