El mes de diciembre de 2003 fue histórico para el cine de fantasía y ciencia ficción, pues se dio a conocer la tercera y última parte de El señor de los anillos: El retorno del rey.
Fue el 17 del citado mes cuando el filme, dirigido por Peter Jackson, llegó a las salas de Estados Unidos y de gran parte del mundo, lo que representaba el final de la saga iniciada dos años antes con El señor de los anillos: La comunidad del anillo (Fellowship of the Ring).
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Para ese año, Lord of the Rings era ya un fenómeno mundial, gracias a las buenas adaptaciones hechas de la obra del autor inglés, J. R. R. Tolkien. Por supuesto, para muchos seguidores puristas de la obra literaria, las adaptaciones dejaban mucho que desear, pues registraban sustracciones y ciertas adiciones consideradas “inaceptables”.
Aun así, las versiones fílmicas fueron todo un éxito de taquilla y también con la crítica.
El filme está basado en la tercera y última entrega de Tolkien, dada a conocer en 1955 y que narra las historias de la Tierra Media. The Lord of the Rings comenzó con un modesto libro, The Hobbit.
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Lord of the Rings: Return of the King, fue la primera cinta del género en ganar múltiples premios Oscar, los 11 a los cuales estaba nominada, incluyendo el de Mejor Película, empatando con Ben-Hur, de 1959, y Titanic, de 1997. Estas tres también son las que más preseas han ganado en la historia de la Academia de Cine y Artes de Estados Unidos.
Por otra parte, la trilogía de Tolkien ayudó a establecer una tradición que se vivió fuertemente durante varios años a nivel mundial, las funciones de estreno de medianoche. A los fanáticos poco les importaba tener que formarse horas antes y salir de los cines ya entrada la madrugada. La fiesta se vivía por medio de la expectativa y el ambiente creado por los cosplayers (seguidores disfrazados) y adeptos en general.
La obra literaria de Tolkien es finita y, aunque se resumió considerablemente -aun contando las versiones extendidas de los tres filmes que se dieron a conocer tiempo después-, las versiones de Peter Jackson son las mejores que se han hecho hasta la fecha. No obstante, una pieza fundamental de la obra de Tolkien aún estaba fuera… El Hobbit.
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El libro fue publicado en 1937 y tiene un lenguaje más sencillo que sus sucesores, debido a que se trata de un libro para niños, escrito para los hijos del autor y que fue publicado a petición de la editora de Tolkien. Fue gracias al estupendo recibimiento por el público en general, que se le pidió al escritor que extendiera su obra.
Así también, El Hobbit es más corto y situado en un tiempo anterior que la trilogía. La idea de realizar un filme en torno a su historia, resultaba irresistible.
Las productoras New Line y MGM, acordaron que el libro sería adaptado de manera similar a la trilogía anterior, en tres filmes que se estrenarían al final de cada año, comenzando el 14 de diciembre de 2012, con El Hobbit: Un viaje inesperado (The Hobbit: An Unexpected Journey).
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Para poder hacer que el libro soportara la expansión, se incorporaron elementos de los apéndices de Return of the King, que ahondan en la historia de Bilbo Baggins (tío de Frodo, figura central en la trilogía), así como en la creación de personajes y de material que no existe en los libros. Este factor generó malos comentarios por un sector de seguidores.
A las nuevas producciones, se unieron nuevos actores y otros más regresaron a sus papeles, dando cohesión a todo el proyecto.
La segunda entrega, El Hobbit: La desolación de Smaug (The Hobbit: The Desolation of Smaug), se estrenó el 13 de diciembre de 2013 y la tercera, La batalla de los cinco ejércitos (The Battle of the Five Armies), el 17 de diciembre de 2014, poniendo punto final a las versiones de Peter Jackson.
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En 2023, se cumplen 20 años del estreno de Lord of the Rings: Return of the King y 10 de The Hobbit: The Desolation of Smaug.
Ahora te presento los artículos donde recordamos Las dos torres y El Hobbit: Un viaje inesperado:
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Y otro con el inicio de la saga fílmica:
