En 1938, Superman tomó al mundo del comic por sorpresa y se volvió una de sus estrellas. En 1978, Superman: The Movie, lo hizo nuevamente.
La idea de una nueva película para el ícono del comic surgió en 1973, y atravesó por un muy enredoso proceso, cambiando de productores, escritores, directores y actores. No obstante, el resultado difícilmente pudo haber sido mejor.
Superman inicia resaltando sus orígenes impresos mostrando la portada de un comic y la fecha de portada, en una secuencia breve en blanco y negro, después de que se abre una cortina que nos recuerda al teatro o al cine mismo. Durante muchos años, los cines más grandes utilizaban cortinas que se abría al iniciar la función. También estaban construidos como teatros antes de que se implementara la modalidad de los “multicinemas”.
El comic que se ve en el filme no existe, fue creado específicamente para dicha secuencia, aunque el logotipo y el precio sí se asemejan a los primeros Action Comics (Superman debutó en el #1).
Es interesante que, en la emblemática secuencia de créditos iniciales, Chris Reeve no aparece entre los primeros nombres. Al primero que vemos es al productor ejecutivo y presentador, Alexander Salkind, seguido de los actores principales, Marlon Brando y Gene Hackman; posteriormente, el nombre del director, Richard Donner. Finalmente, el escudo de Superman invade la pantalla y a continuación, el nombre de la película… Superman.
Después de todo ello, es cuando aparece el nombre de Christopher Reeve, seguido de los demás actores.
Esto tiene una sencilla explicación. Reeve era un actor desconocido en ese entonces y Superman fue su primer papel importante. Como parte del arduo proceso de producción, se pensó inicialmente en contratar a algún actor de renombre para dar vida a Clark Kent y su alter ego. Cuando se sumó Donner al proyecto, las cosas cambiaron y su propuso a un desconocido para que fuera más fácil crear la ilusión del superhéroe.
Marlon Brando ganó 3.7 millones de dólares por sus pocas escenas, filmadas en dos semanas, y Gene Hackman obtuvo 2 millones; a Reeve se le pagaron 250 mil dólares por ambas películas. En retrospectiva, si por algo son recordados estos filmes, es por la actuación de Chris Reeve.
La dualidad que el actor recrea para ambos personajes, es verosímil y realista, haciendo un contraste con la versión de Lex Luthor, que desaprovecha un poco a Gene Hackman, al mostrarlo como un villano de caricatura. Sin embargo, el tratamiento podía ser considerado necesario, pues el filme estaba destinado para un público infantil y juvenil. El contraste con Reeve, probablemente era para apelar al público mayor que es, generalmente, el que lleva a los pequeños al cine.
Reeve consiguió crear a dos seres distintos, dos extremos de un mismo espectro conductual; por un lado, el tímido y torpe Clark Kent, quien finge serlo para poder pasar desapercibido. Lo que no toma en cuenta es que su misma torpeza puede llegar a llamar la atención. Aun así, el disfraz funciona, pues sus más allegados lo desestiman como Superman.
El lado heroico de Kent, Superman, es interpretado de una manera por demás creíble, con orgullo y porte, dando la sensación de magnanimidad. El actor Sir Roger Moore, comentó en su biografía que observó a Reeve caminar por los foros de los estudios Pinewood (en Iver Heath, Inglaterra) y que, cuando iba caracterizado como Superman, muchas mujeres lo seguían. Cuando caminaba vestido como Clark Kent, pasaba inadvertido.
Mario Puzzo, autor de El padrino, fue contratado para escribir los guiones de Superman y Superman II. En otro de los movimientos de producción, el guion se modificó varias veces y se dice que pocos de los diálogos originales se mantuvieron.
Los efectos visuales, el diseño de producción, vestuario y banda sonora, son elementos que hay que analizar de este filme, siendo innovadores y pioneros.
La música de John Williams, es una de sus bandas sonoras más recordadas y celebradas, creando una simbiosis con Superman para los espectadores de varias generaciones.
Fricciones en la realización provocaron el rompimiento de Donner con los productores y fue eliminado de la secuela, pese a haber dirigido casi la totalidad de la película. En 2006, se dio a conocer Superman II: la versión del director en la que, por cierto, Donner no tenía interés de participar inicialmente.
De Superman: The Movie, también existen varias versiones.
Superman: La película, de 1978, celebra los 45 años de su estreno.
Ahora te ofrezco otras notas acerca de este tema, tales como Superman II:
La incursión de Richard Donner escribiendo comics con, precisamente, Superman:
Superman: Returns de 2006, una continuación directa a la versión de Reeve, con Brandon Routh:
Y la más reciente versión en cine, Man of Steel, de 2013, con el británico, Henry Cavill:
