Se convirtió en clásico instantáneo y en una de las propiedad más lucrativas de la industria cinematográfica: Avatar, escrita y dirigía por el mago del cine (y máquina de hacer dinero), James Cameron, cumple sus primeros 10 años de vida.
Avatar no sólo es una historia entretenida y vistosa, sino que presenta un problema real y que, por desgracia, sigue siendo vigente: la destrucción a la naturaleza y las especies animales por parte del hombre, quien no sólo se limita a eso, sino que también gusta de destruir a otros hombres, mujeres y/o niños.
Sin embargo, Avatar no es un cuento de moraleja condescendiente; plantea las cosas de una manera real, dura, y se pone a sí mismo como enemigo. En la cinta no se habla de un tercero como “villano”, sino al gobierno y corporaciones estadounidenses; sin miramientos. Es una crítica de los norteamericanos a los norteamericanos y de la que las demás naciones bien podríamos aprender.
La dirección e historia de Cameron nos lleva por un mundo de idilio, no tan distinto del nuestro; muchas especies animales que vemos, son reminiscentes de las que tenemos en nuestro planeta y a las cuales estamos exterminando. El idilio se termina en cuanto el ser humano se entera de su existencia y riqueza de recursos. La raza de humanoides de tez azul, los Na’vi, también nos recuerdan minorías azotadas durante siglos por el “hombre blanco civilizado”. Las tradiciones y cultura son minimizadas por una especie que no sabe asimilar ni adaptarse, que no se esfuerza por comprender e integrarse; que sólo conquista, devora, arrasa.
Cameron es un director que produce poco, pero que suele dejar huella. Pese a no tener planeada a Avatar como una franquicia, la alta demanda lo ha orillado a reconsiderar y generar dos secuelas: Avatar 2 y 3, a estrenarse el 17 de diciembre de 2021 y diciembre 22 de 2023, respectivamente.
Durante sus 10 años de vida, Avatar mantuvo el récord como la película más taquillera de la historia, título arrebatado hasta este año –y con diferencia de tan sólo unos millones de dólares-, por Avengers: Endgame. Si bien la producción de Cameron tuvo varios reestrenos que le permitieron alcanzar la cifra de $2, 800 millones de dólares, se cree que aún con el ajuste inflacionario histórico de Estados Unidos, Avatar se colocaría sólo por detrás de Gone With The Wind (Lo que el viento se llevó), Titanic (también de James Cameron) y Star Wars, según lo recaudado en todo el mundo.
Una gran cualidad del filme es su bien seleccionado reparto histriónico: Sam Worthington como el protagonista y nexo entre dos mundo, Jake Sully; Zoe Saldana como la nativa Neytiri; Stephen Lang como el perturbado coronel Miles Quaritch; Sigourney Weaver como la científica Dra. Grace Augustine; Giovanni Ribisi como el empresario corrupto Parker Silfridge y Michele Rodriguez como la piloto Trudy Chacon.
El filme también tiene sus polémicas, pero esa no será materia el día de hoy, cuando recordamos esta película que se ganó a toda una generación desde su estrenó el 18 de diciembre de 2009 y que la lleva a cumplir su primera década de historia.
