Los géneros musicales son difíciles de definir en cuanto a su origen. Se puede tener un dato aproximado, pero generalmente existen varias vertientes y versiones. También depende de las opiniones y lo que decida cada seguidor o historiador. Tal vez no sea 100% cierto, mas en lo que mucha gente está de acuerdo es que Black Sabbath, disco debut homónimo del 13 de febrero de 1970, es una de las bases del Heavy Metal. Si no es que el primer disco del género.
En lo que no hay debate es que es una placa de excelente calidad que dio a conocer a una de las bandas de rock más importantes del planeta. Black Sabbath, o Sabbath Negro, se formó en 1968 con Bill Ward (batería), Tommy Iommi (guitarras), Geezer Butler (bajo) y Ozzy Osbourne (voz). En muy poco tiempo se dieron a conocer, fueron firmados y lanzaron su primer sencillo, “Evil Woman”, cover del grupo Crow.
La producción debut de Sabbath contiene sólo 7 canciones, pero todas clásicas dentro del repertorio del grupo y del metal mismo. Comenzando por el track que abre, homónimo, de mensaje obscuro. Recordemos que Sabbath capitalizaba mucha de su fama y contenido en mensajes de magia negra y ocultismo. Esto les ayudaba, por supuesto, a vender discos, como suele suceder con todo lo prohibido.
Si hacemos de lado toda esa cubierta ensalzada, tenemos una gran base musical, que suena aún a blues, con armónicas, pero también, guitarras distorsionadas. Con baterías sin control y la inconfundible voz de Osbourne.
Como mencionaba, mucha de la popularidad del metal se basó en el misticismo, en las leyendas que se generaban a menudo con fines mercadotécnicos. También tiene algo de fantasía, como en “The Wizard”, que podría parecer algo enfocado a la magia negra, pero que en realidad fue inspirado por el hechicero Galdalf, personaje de Tolkien en Lord of the Rings y que ha sido motivo de una gran número de canciones.
De otras composiciones, como “N.I.B.”, se rumoraban muchas cosas; los integrantes del grupo no hacían mucho por desmentir. En realidad, es una canción que toma bastante de “Sunshine of Your Love” de Cream, desde el riff (melodía de la guitarra) hasta la temática, mientras que el nombre es simplemente una referencia a la barba de Bill Ward.
Entre leyendas y realidades, es como una de las producciones responsables de la creación del metal llega a su medio siglo de vida. Y por eso, lo recordamos.
