Existió una época que pudiera parecer muy lejana en la que los jóvenes se rebelaban utilizando la música. Las generaciones anteriores les habían enseñado que una de las armas más poderosas para cambiar ideologías partía tan sólo de siete notas.
Desde la generación de la postguerra, hombres y mujeres que comenzaban a vivir se reunían en garajes, salas, habitaciones, parques. Debatían y compartían. Creaban. Y el rock era la herramienta predilecta. En muchas ciudades incluso se le temía, no por su violencia potencial; al contrario, no era necesario levantar una mano (aunque sí se llegaba a creer que generaba violencia).
El rock alternativo de los 90’s entregó al mundo varias agrupaciones importantes como Faith No More, que si bien no eran adolescentes, sí lograron conectar con jóvenes de todo el mundo, como en México.
La agrupación musical se formó a finales de los 70’s y vivieron una serie de fluctuaciones dentro de la alineación. Para la preparación de su tercer disco, The Real Thing, esta ya se había asentado. Con la inclusión del vocalista Mike Patton, fue que presentaron el tercer disco en su carrera profesional.
The Real Thing no hizo fuego de inmediato pues la placa se dio a conocer el 20 de junio de 1989 y fue hasta el lanzamiento del segundo sencillo, Epic, en enero de 1990 que este prendió la mecha:
Poco a poco, se descubrió la riqueza musical de Faith No More, la fusión de estilos que van desde el más sureño country hasta el rap emergente en los 90’s.
The Real Thing era, como su título indica, algo verdadero y auténtico. Se podía olfatear y escuchar. El disco contiene 11 canciones entre las que también se encuentra un cover, War Pigs, original de Black Sabbath y que sirvió para que la generación emergente abriera la puerta a un mundo nuevo, el de los grupos que llegaron antes:
Cinco singles se desprendieron del tercer disco de Faith No More, que ha sido el más importante de su carrera ya que fue con el que se dieron a conocer en su calidad de banda internacional y pese a que la rotación de personal continuó al interior, para muchos la que se presentaba aquí era la alineación definitiva.
The Real Thing es otra de las placas que cumple 30 años en 2019 y, al menos para un servidor, ha sido un gratificante reencuentro. Espero que para ti que lo lees, lo sea también. O mejor, un pretexto para conocerlo. El mejor momento de nuestras cosas favoritas es cuando las descubrimos.