El compositor alemán, Jaques Offenbach, murió un día como hoy, pero del año 1880 por lo que conmemoramos 140 años del evento.
Compositor perteneciente al periodo romántico de la música, fue de prolífica inspiración y compuso una vasta cantidad de obras.
Casi 100 operetas y la inacabada Les contes d’Hoffmann (Los cuentos de Hoffman, 1881) forman parte del repertorio del germano. La belle Hélène (1864), La Vie parisienne (1866) y La Grande-Duchesse de Gérolstein (1867) son algunas de las obras famosas del compositor y chelista.
Offenbach ganó el favor del primer presidente de Francia, Napoleón tercero, a quien hacía parte de su obra musical. Incluso fue premiado con la nacionalidad de aquel país y el mérito de Légion d’Honneur.
Jakob Offenbach nació el 20 o 21 de junio de 1819 en Cologne, ciudad del entonces imperio de Prusia. Se dice que su apellido original era Eberst, pues su origen era judío y que pudo haber adoptado el “Offenbach” por el lugar de procedencia de su padre.
Fue precisamente su progenitor quien, a los seis años, le enseñó a tocar violín y a los 8, ya componía sus propias obras. Una de las características de su trabajo fue la sátira y alta insinuación sexual, más su nivel técnico era connotado.
El famoso baile del can-can de Offenbach aparece en Orphée aux enfers (Orfeo en los infiernos, 1858). Apenas en 2019 se celebró el bicentenario de su natalicio y en 2020, tenemos nuevo motivo para recordarlo, aunque no lo necesitamos.