La competencia es una cualidad inherente del ser humano. Ya sea como protagonista o como espectador, las rivalidades han formado parte de nuestra historia, cultura y se remonta al instinto de supervivencia. Las batallas se ven en deportes y entretenimiento.
Lo mismo pasa con algunas marcas comerciales similares. En el caso de los comics, desde los 60’s es común comparar a los héroes de DC con los de Marvel. ¿Quién es más fuerte? ¿Supeman o Thor? ¿Silver Surfer o Green Lantern? ¿Captain America o Batman?
Mientras que estas peleas ficticias resultan interesantes, algunos fans se polarizan y eligen sólo una de las compañías cuando, en realidad, no existe motivo para hacerlo ya que la mayoría de los creadores de comics han trabajado para ambas, así como para compañías independientes. Al ser, la mayoría de ellos, agentes libres, tienen la facilidad de aceptar el proyecto que mejor les convenga. Asimismo, los profesionales del medio suelen ser seguidores de los héroes de una y de otra.
Por fortuna, sí hemos podido ver encuentros entre héroes de distintas compañías. Ambas editoriales han llegado a acuerdos de colaboración que tienen que ser asentadas de manera legal. De esta forma, hemos podido ver historias entre Teen Titans y X-Men, Hulk y Batman, Spider-Man y Superman, Galactus y Darkseid. Incluso, en 1996, se realizó un crossover de cuatro números, dos de ellos producidos por Marvel, los otros dos por DC en la cual se enfrentaban unos contra otro. El distintivo de este evento es que los resultados se definieron por medio de las votaciones de los fans. DC vs. Marvel también desprendió una serie de especiales de un número donde se hacían amalgamas de los héroes.
Los enfrentamientos oficiales entre DC y Marvel se remontan a los 70’s y se cree que el primero de ellos se llevó a cabo en 1976 con Superman y The Amazing Spider-Man. Sin embargo, esto no es totalmente correcto. Sí fue la primera vez que los héroes de las dos compañías se enfrentaron (y se hicieron amigos), pero no la primera en la que DC y Marvel realizaron un proyecto en conjunto.
Este honor es para la revista que este 19 de agosto de 2020 cumple 45 años de haber sido publicado: el especial de la MetroGoldwyn-Mayer: The Marvelous Wizard of Oz, película de 1939 con la actuación icónica de Judy Garland y cuya adaptación se basa en la novela de L. Frank Baum, publicada originalmente en mayo de 1900 y cuyo título completo es el que se empleó en la versión en comic.
También existía una versión musical en Broadway titulada The Wiz, estrenada en 1975 y que tuvo una peculiar versión en cine en 1978 con Michael Jackson y Diana Ross. La versión de Garland era repetida constantemente en la televisión y se planeaba el lanzamiento de una línea de juguetes por lo que el mundo de Oz se encontraba de moda nuevamente.
El comic en cuestión está basada en el filme de la MGM. Según los créditos, la producción corrió tanto a cargo de Stan Lee como la de Carmine Infantino. El editor y escritor fue Roy Thomas, con dibujo de John Buscema y tintas de Tony deZuñiga, principalmente, además de otros artistas. La portada y dirección artística fue de John Romita Senior, por lo que se trataba de una verdadera colaboración entre las dos editoriales.
The Marvelous Wizard of Oz fue un especial un tanto elevado de costo, de 1.50 dólares, pero también de mayor tamaño, llamado Treasure Edition y que era similar al de las revistas. El total de páginas era de 80, cuando un comic normal constaba de 22.
Además de la adaptación del guion de la película, el comic cuenta con biografías tanto del autor del libro como de los actores, un mapa del mundo de Oz, además del anuncio de lo que sería el segundo número de MGM’s Marvelous Wizard of Oz. Sin embargo, este no se realizó. La buena noticia es que, en lugar de la segunda edición, pudimos presenciar en 1976 el primer encuentro entre dos de los más grandes superhéroes: Spider-Man y Superman.
Así es que se cumplen 45 años de la primera colaboración entre las dos principales compañías de comics: Marvel y DC con el extraño proyecto de MGM’s Marvelous Wizard of Oz. Esta tuvo una racha que duró hasta 1982 y se truncó durante más de una década.