La inteligencia artificial (IA) se ha convertido en una herramienta clave en la producción de contenidos para televisión y plataformas de streaming. Su uso permite ahorrar tiempo y costos, sin comprometer la calidad visual de las producciones.
Marianne Carpentier, directora de innovación en Newen Studios, recuerda su primera experiencia con la IA. Durante la cuarentena por COVID-19, utilizaron esta tecnología para reemplazar el rostro de una actriz enferma. “Fue barato y eficiente, no se podía notar la diferencia en pantalla”, explicó.
Emily Golden, de la empresa de IA Runway, presentó un ejemplo similar. Para un anuncio con el boxeador Anthony Joshua, la IA generó primeros planos realistas sin que él estuviera presente. Esto redujo el tiempo de producción en un 50%, lo que también disminuyó el presupuesto.
Además de ahorrar tiempo, la IA permite realizar tomas imposibles de capturar en el set. Golden mencionó que una toma de dron puede ser creada digitalmente sin regresar al lugar de filmación. “Incluso una toma rudimentaria puede ser usada como base”, afirmó.
Carpentier destacó que la IA se emplea en la planificación y optimización de rodajes, especialmente cuando hay restricciones de tiempo y disponibilidad de actores o locaciones. “La IA maneja variables complejas que antes requerían a varias personas”, añadió.
A pesar de sus ventajas, la IA plantea desafíos. Entre ellos, Carpentier menciona los derechos de autor y el uso de datos para entrenar los modelos de IA. Estos aspectos deben ser regulados para evitar conflictos.
En cuanto a la creatividad, la IA puede generar material preliminar como moodboards y pitchs, pero su aportación sigue siendo limitada. “Solo homogeniza los contenidos”, afirma Guillon, directora de formación del festival Séries Mania.
Guillon destaca que la industria estadounidense está por delante en el uso de IA, y es crucial que Europa no se quede atrás. En noviembre, su entidad organizará un taller de escritura basado en IA generativa.
Aunque se ha probado que la IA puede redactar guiones y notas de producción, su papel es el de un “súper asistente”. La creatividad humana sigue siendo esencial para dotar de visión a los proyectos audiovisuales, concluyen los expertos.
El avance de la IA también podría impactar el mercado laboral. Jonathan Verk, de Social Department, comenta irónicamente que aunque la IA podría reducir empleos, esto aumentará la demanda de contenido, lo que es positivo para la industria del entretenimiento.
