Se cumplieron noventa años desde que se entregó el primer trofeo conocido como “Oscar”. La ceremonia inaugural fue en 1929 y para la segunda (de 1930), se transmitió por radio en Estados Unidos, además de que los resultados fueron enviados a los diarios para la edición del lunes. A mediados de los 50´s, se podían ver por televisión. Hoy en día, son considerados como uno de los premios más importantes del cine en una buena parte del mundo.
La fijación que tenemos por lo que pasa detrás de las cámaras en los procesos de producción es parte de lo que alimenta el interés por este tipo de eventos. Muchas veces preferimos ver al “artista” y no la obra de arte en sí; por ejemplo, se ha vuelto más famoso Diego Rivera por sus infidelidades, por ser verdugo y muso de Frida más que por su propia obra; o la esquizofrenia por todos conocida de Vincent Van Gogh -que le llevó a mutilarse parte de una oreja- es más famosa en algunos momentos que sus propios cuadros. Por cierto, la excelente película “Loving Vincent” -narrada por medio de su estilo pictórico-, se ganó una nominación a mejor cinta animada. Regresando al punto y para resumir, la curiosidad y el morbo son parte de lo que mantiene vivo este tipo de entregas; así como las ganas de pertenecer, de encontrar una voz externa a nuestros sentimientos y pensamientos por medio del arte.
Mucho ha acontecido desde hace 90 años cuando La Academia de Artes y las Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos entregó su primera estatuilla: la creación de la televisión a blanco y negro y luego de color, la llegada del cassette de audio, el videojuego, el videocassette, el disco compacto, la usb, la computadora, el internet, el HD, el 4K el 8K y, aun así, el cine sigue siendo uno de los principales medios de entretenimiento y de comunicación de toda la gente. Todos lo consumimos de alguna manera. La gente del gremio lo sabe y tan bien lo sabe qué Jimmy Kimmel llevó a un puñado de creadores, entre ellos Guillermo del Toro, a una sala de cine que se encontraba a un costado del Dolby Theather en Los Angeles para entregar bocadillos a los asistentes, dando un giro interesante a la ceremonia.
La entrega en sí, tuvo un aire nostálgico, bien ganado tras 90 años de llevarse a cabo y que tal vez sólo Kirk Douglas recuerda con sus 101 años de edad. Una mezcla de autocrítica, política, de aceptación e inclusión son algunos de los temas que se destacaron en esta ocasión. Una protesta silenciosa del “no al acoso de la mujer” por medio de las vestimentas negras, así como una aparente madurez que atraviesa la industria, evidenciada por Jimmy Kimmel quien -además de redimir a Warrren Beatty y Faye Dunaway por la pifia garrafal del año pasado-, hizo bromas y burlas directas a los actuales gobernantes de Estados Unidos.
Como decía, la inclusión y la representación se han vuelto parte del evento. Y esa inclusión fue determinante para el triunfo de la cinta chilena A Fantastic Woman, que lleva a Daniela Vega, la primera actriz trans en el protagónico. Así como fue importante para el éxito de Coco (de Disney/ Pixar) en la categoría de película animada y canción original o incluso para las apariciones de actores como Eugenio Derbez, Eiza González, Salma Hayek, Gael García y Óscar Isaac (este último, guatemalteco). Y qué decir del triunfo de Guillermo del Toro como Mejor Director y “Shape of Water” como Mejor Película (además de Mejor Score). Así, ya son tres los mexicanos ganadores del Oscar a la dirección: Cuarón, Iñárritu y ahora, el buen Guillermo.
Otros de los principales premios fueron: Actor de Reparto para Sam Rockwell con Three Billboards Outisde Ebbing, Missouri, derrotando a otro favorito, Chris Plummer quien, a su vez, sustituyó al caído en desgracia, Kevin Spacey, tras los escándalos sexuales del año pasado. La Mejor Actriz de Reparto fue Allison Janney por I, Tonya, película que narra la vida de la gimnasta Tonya Harding. La Mejor Edición se la llevó Dunkirk, mientras que Gary Oldman obtuvo su primer merecido premio de La Academia por su interpretación del Primer Ministro británico, Winston Churcill en Darkest Hour. La Mejor Actriz fue Frances McDormand por Three Billboards Outside Ebbing, Missouri.
Por momentos parecía que la gran ganadora de la noche sería Dunkirk de Chris Nolan pues comenzó ganando la mayoría de sus nominaciones más tras el triunfo de Shape of Water para Mejor Score, la cinta no volvería a soltar el estrado
Y con el momento cumbre de Guillermo Del Toro y la redención de Beatty y Dunaway en la presentación del premio, terminó la entrega número 90 de los premios de cine estadounidense, misma que es la primera que comentamos en updatemexico.com. Tenemos una cita para 2028 en este mismo portal para que platiquemos del Centenario de los Oscars. ¿Te apuntas?