A ContracorrienteThink Tank

El salvavidas de la informalidad

Querétaro se ubicó entre los cinco estados donde más creció la informalidad en el último año. El dato se puede leer como una buena o mala noticia al mismo tiempo.

El enfoque negativo consideraría que la informalidad no contribuye a la hacienda pública y es una competencia desleal para quienes están en la formalidad.

Sin embargo, los datos pueden tener una lectura diametralmente opuesta. La economía informal del estado creció 7.9% a tasa anual durante el segundo trimestre de 2024. Solo en Campeche, Nuevo León, Durango y Quintana Roo la economía informal creció más rápido.

La informalidad aporta a México la nada despreciable cantidad de 6.03 billones de pesos y da empleo a 32.5 millones de personas. En el IMSS apenas hay 22.6 millones de trabajadores registrados.

El estado de Querétaro tiene una población económicamente activa corresponde a 1.19 millones de personas, de los cuales el 44% de las y los queretanos están ocupados en condiciones de informalidad.

El INEGI desglosa la economía informal en dos grandes componentes: el sector informal y
las otras modalidades de la informalidad.

En el sector informal están todas las actividades económicas realizadas por las empresas sin personalidad jurídica y que son propiedad de los hogares.

Las otras modalidades de informalidad incluyen a quienes trabajan en establecimientos formales pero no cuentan con prestaciones como vacaciones, aguinaldo o liquidación por despido.

En esa condición hay quienes incluso trabajan para las instituciones públicas. Los candados presupuestales y las necesidades operativas orillan a la contratación por honorarios o por outsourcing.

Así, casi 56 de cada 100 queretanos están empleados en una unidad económica formal, reciben salario y prestaciones. Otros 20 están en unidades económicas formales, pero sin prestaciones y otros 22 están en establecimientos informales.

La tasa de desocupación indica que solo 2 de cada 100 queretanos buscan trabajo y no lo encuentran.

En ese conjunto de 100 queretanos hay 25 en condiciones críticas de ocupación. Ya sea que trabajen hasta 35 horas a la semana y no consigan un salario mínimo completo o que trabajen hasta 48 horas a la semana y a penas obtengan hasta 2 salarios mínimos.

Las cifras dibujan a la informalidad como una válvula de escape para la sociedad y los gobierno. De lo contrario ¿cuál sería la situación en las calles y en los hogares con un desempleo del 44%?

Gabriel Morales López

Periodista, académico y empresario | Llevo trabajando en la web desde 1998 | Master en Periodismo por El Mundo y Universidad San Pablo CEU, becario de la Fundación Carolina 2005-2006. | Sígueme en LinkedIn.

Deja un comentario

Back to top button