Las limitaciones más grandes se encuentran en nuestra mente. Habitan allí las grandes murallas que obstaculizan la realización de una vida plena y feliz. Luchamos constantemente contra nuestro peor enemigo: nosotros mismos.
Ésta es la razón por la que la verdadera tarea es buscar por dentro, encontrar y descubrir cada uno de aquellos pensamientos que nos hicieron creer que éramos algo que realmente no somos.
Esa lucha implicará tres cosas fundamentales:
La Esperanza de saber que somos más que lo que hoy podemos ver, y más que aquellos posibles errores que hemos podido cometer.
La confianza de creer que podremos descubrir nuestro verdadero potencial y desde allí alzarnos en el vuelo de llegar hasta donde hemos soñado.
La disciplina de mantenernos firmes en ese camino de encuentro personal, pues, muchos nos dirán que es una perdida de tiempo, incluso afirmarán que no encontraremos nada valioso. Pero la disciplina sumada a la esperanza y a la confianza darán como resultado el encuentro con el ser verdadero que habita dentro nuestro.
Nada puede ser tan difícil que nos separe de encontrar nuestra verdadera realidad.
Hoy es un día maravilloso, hoy es el séptimo día.
Lo único que te pido es, que creas que sí es posible.