Pues todo parece indicar que sí, pese a la renuencia de algunas empresas, la mayoría de las personas laborando nos dimos cuenta de las ventajas y desventajas de ir y venir de un lugar a otro para hacer actividades laborales, que se desarrollaron muy bien desde casa.
Según el Primer Informe de Tendencias Laborales realizado por Microsoft, 8 de cada 10 trabajadores desea mantenerse en estado híbrido laboralmente, 72% de las personas comenzamos a trabajar desde casa el año pasado, ya sabemos los motivos.
El modelo laboral híbrido no solo deberá tomar en cuenta la atención en resultados, pues no por pasar 9 horas nalga, significa que eres altamente productivo, aunque para llegar a ello, hace falta que las empresas delimiten actividades, responsabilidades y deadlines reales.
También, este modelo obliga a repensar las prioridades a resolverse 1:1, en grupo o por email, pues el exceso de juntitis agutiditis, en la mayoría de los casos es porque se dejan de atender los asuntos cuando aún están en la categoría de “importantes”, pues pasaron a la de “urgentes” y entonces todo mundo esta “on fire“. Lejos de resolverse genuinamente, se toman desiciones de control de daños, se estresa al equipo y no se evalúan todas las opciones posibles ante un tema.
Incluso si se trata de mantener la interacción humana, las videoconferencias con hora de término y guiadas para evitar su eternidad, son una opción productiva.
No por estar en casa, los colaboradores deben estar conectados todo el tiempo, por eso es clave saber cuáles siguen siendo tus responsabilidades, tiempos y actividades, pues la desconexión y el descanso serán claves para continuar preservando la calidad de vida.
Por último, no hay que dejar de observar que, el desplazamiento a las distintas zonas de trabajo, significa como en todo tiempo, pasó de ser tiempo perdido o muerto a tiempo invertido en mejorar el bienestar integral de quien colabora y eso queridos míos no tiene precios suficiente.
Claro que no son los únicos puntos a observar, pero como todo modelo en proceso, el chiste está en atender con flexibilidad cada ajuste de tuercas.