Algunos eventos de comic parecen imposibles de creer y su importancia radica, no en el hecho en sí, sino en su realización. Como en La muerte de Wolverine…
En verdad.
La muerte del inmortal Wolverine.
Seamos sinceros, Wolverine es uno de tantos personajes del medio que no verá llegar su día final. Y mucho tiene que ver que muchos de ellos se han convertido en generadores de ganancias millonarias. Prescindir de ellos sería, como se dice, matar a la gallina de los huevos de oro.
Esto tampoco quiere decir que jamás habrá de pasar, mas es sumamente improbable.
Desde la década de los noventa, algunos eventos de comic se manejan a gran escala, con planes mercadotécnicos diseñados para incentivar las ventas. Tal hecho puede resultar en prolongaciones innecesarias de las historias y que pueden generar fatiga en los lectores.
En ocasiones, los eventos conjuntan varias de estas circunstancias.
Cuenta regresiva.
En 2014, Marvel anunció uno de sus eventos principales, La muerte de Wolverine. La incredulidad del auditorio era de esperarse. La editorial tampoco pretendía que el suceso fuera definitivo, mas había una historia que merecía ser contada.
Y si bien, el deceso del mutante no sería definitiva, la compañía sí pensaba que tuviera una larga duración.
Fue así que, el 3 de septiembre de 2014, se publicó la primera de cuatro partes que narraría el aparente deceso de Logan. La entrega de los siguientes episodios no sería de forma mensual -formato habitual para el comic estadounidense-, sino que se ofrecerían más rápidamente. De esta manera, la parte final fue publicada el 15 de octubre de ese año.
La antesala del evento se promocionó por medio de cintillos en la parte superior de las portadas del comic mensual de Wolverine, en una cuenta regresiva, iniciando en Wolverine #8, donde se anunciaba “3 meses para morir”. En el #12, ese título dejó de ser publicado.
El equipo creativo y su propuesta.
La historia que da cause a la cuenta regresiva, es conocida como “Killable” (algo así como “Asesinable”).
Otro de los títulos de Logan, Wolverine and the X-Men, concluyó también con el #12, el 26 de noviembre de 2014.
El equipo creativo de la historia principal, Death of Wolverine, era el escritor Charles Soule y el artista Steve McNiven, no conocido por su rapidez para dibujar, pero quien consiguió ilustrar los cuatro capítulos y que estos fueran publicados sin un retraso significativo.
El argumento no era totalmente nuevo y fue usado por vez primera por el escritor Chris Claremont en Uncanny X-Men, durante los años ochenta: Wolverine pierde el factor de curación que lo hace indestructible y que le ha dado longevidad. En el caso de la versión de 2014, dicha habilidad ha dejado de existir por completo.
Reed Richards (Mister Fantastic de los Fantastic Four), ofrece a Logan buscar una cura al tiempo que le pide mantenerse oculto de sus enemigos. El problema es que la noticia se ha esparcido y solo es cuestión de tiempo para que diversos rivales ataquen al X-Man, pues una recompensa por su captura se ha hecho pública entre los mercenarios y asesinos.
El momento final.
El contrato surge en la isla de Madripoor y ha sido Viper quien lo ha liberado en el mercado de los mercenarios.
Organizaciones como A.I.M., Hydra, e individuos como Nuke, intentan cobrar la recompensa.
En la miniserie vemos a otros viejos rivales, como Lady Deathstrike, Sabretooth y Ogun, además de amigos como Kitty Pryde. Al final, Logan debe sacrificar su vida de la manera más brutal, con tal de detener una sombría estrategia que involucra al doctor Cornelius, uno de los responsables del programa Weapon X, que proveyó a Logan de su esqueleto de Adamantium.
El final para Logan llegó, pero Marvel tenía planes más allá de su fallecimiento, que incluían los de su eventual regreso, que ocurrió cuatro años más tarde. De ello, hablaremos en tres días más. Te espero.
Te ofrezco otra historia en la que Wolverine muere, aparentemente:
Otra donde estuvo a punto de perder la vida, gracias a Magneto:
El final del primer volumen del comic de Wolverine:
El inicio de dicha publicación, algunos años atrás:
Y la -casi- boda de Wolverine y Mariko: