Estados Unidos lanzó este sábado un ataque aéreo que destruyó instalaciones de enriquecimiento nuclear en Irán. El presidente Donald Trump advirtió que habrá nuevos bombardeos si Teherán no accede a restablecer la paz.
“Habrá paz o una tragedia para Irán mucho mayor que la que hemos presenciado en los últimos ocho días. Recuerden que aún quedan muchos objetivos”, declaró Trump en un discurso a la nación. Añadió que, de ser necesario, “perseguiremos esos otros objetivos con precisión, rapidez y habilidad”.
Desde Jerusalén, el gobierno de Israel manifestó su respaldo a la acción militar. Según medios locales, funcionarios israelíes consideran que el ataque debilita la capacidad de Irán para desarrollar armas nucleares y fortalece la seguridad de la región.
En Teherán, las autoridades calificaron el ataque como un “acto de guerra” y aseguraron que responderán. “Estados Unidos ha cruzado una línea roja. Nuestra respuesta será proporcional y firme”, afirmó un portavoz del Ministerio de Exteriores iraní citado por la televisión estatal.
El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su preocupación y llamó a detener el aumento de las hostilidades. “Es fundamental evitar una espiral de caos”, dijo en un comunicado. “No hay solución militar. El único camino a seguir es la diplomacia. La única esperanza es la paz”, añadió.
Mientras tanto, la comunidad internacional sigue de cerca la situación ante el riesgo de un conflicto mayor en Medio Oriente.