El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dejó de tener síntomas de COVID-19, luego de que hace una semana dio resultado positivo a la prueba clínica, por lo que regresó a su despacho en la Casa Blanca.
El gobernador de 81 años de edad estuvo aislado en Orange a partir de que le fue detectada la infección viral, pese a que desde un principio mostró síntomas leves.
Kevin O’Connor, médico de Biden, difundió una carta en la que señaló que, en el curso de su infección, el mandatario nunca manifestó fiebre y sus signos vitales se mantuvieron normales y sus pulmones se mantuvieron limpios.
El galeno dijo que Biden seguirá siendo vigilado “por cualquier recurrencia de la enfermedad” mientras continúa desempeñando sus funciones presidenciales.
El presidente estadunidense tiene previsto dar un mensaje a la Nación mañana miércoles sobre su decisión de ya no buscar la reelección en los comicios presidenciales del 5 de noviembre y el jueves tiene programada una reunión con el primer ministro Benjamin Netanyahu.
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