El gobierno mexicano expresó su preocupación por las redadas migratorias realizadas esta semana en Los Ángeles, que dejaron decenas de personas detenidas, entre ellas al menos 11 mexicanas y mexicanos.
A través de un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores hizo un llamado “respetuoso pero firme” a las autoridades de Estados Unidos para garantizar el respeto al debido proceso y la dignidad humana de las personas migrantes.
Los operativos estuvieron a cargo del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) y, según medios locales, ocurrieron en distintos puntos de la ciudad californiana, donde vive la mayor comunidad de origen mexicano fuera del país.
La cancillería mexicana informó que su red consular en Estados Unidos reforzó sus campañas informativas para que la población conozca sus derechos ante cualquier contacto con autoridades migratorias.
“El Gobierno de México rechaza las prácticas que criminalizan la migración y reitera que este fenómeno debe ser abordado desde una perspectiva integral, humana y con corresponsabilidad regional”, se lee en el comunicado.
Los Ángeles es uno de los destinos tradicionales de personas mexicanas que migran por motivos económicos o familiares. Las acciones del ICE en la ciudad han generado reacciones de organizaciones civiles y grupos de defensa de derechos humanos, que exigen mayor transparencia y rendición de cuentas.
Con información de AFP