Las estrellas no siempre están en el escenario. Algunas son las que ponen la alfombra por la cual las demás caminan. Es De-Lovely con Kevin Kline y Ashley Judd.

De-Lovely… “De-encantador”.
No todo el público está a favor de los musicales, mas para plasmar parte de la vida del gran compositor, resulta una gran elección.
El filme tuvo su estreno el 2 de julio de 2004 y fue dirigido por Irwin Winkler, multipremiado productor de filmes como Double Trouble (Amor en ronda, 1967), con Elvis Presley, They Shoot Horses, Don’t They? (¿Acaso no disparan a los caballos?, 1969), con Jane Fonda y Rocky (1976), con Sylvester Stallone.
La producción narra la vida del compositor Cole Porter, uno de los más reconocidos desde la década de 1910 y hasta la de 1950, en una época en que la música era primordial para el éxito de obras de teatro de Broadway y películas de Hollywood.
La cinta lleva el título de una de las canciones de Porter, que juega con las palabras y el prefijo “de”, encajando en la métrica de los versos y de la música, pero cuya mala pronunciación hace que las palabras carezcan de significado.
El catálogo musical de Porter, mostrado en la película, es suficiente para justificar el precio de entrada. La historia, además, está aderezada por la historia de amor y la tragedia en la vida del músico y su esposa, Linda.
La historia.
Se cree que los tiempos antiguos fueron mejores, o más sencillos. Nada más lejano de la verdad. Y para prueba esta producción que, sí, por una parte, realza el romanticismo de la época, de sus participantes y de las industrias que ya no existen como se conocían. Por el otro, retrata las dolencias que vemos en cualquier época.
Al mismo tiempo, De-Lovely es una historia de secretos y de tormentos, de las espirales en las que caemos y que han sido creadas por nosotros mismos.
La película es una obra de teatro observada por su protagonista, un Cole Porter de mayor edad que recuerda sus años mozos, con algo de nostalgia y con algo de arrepentimiento. Es la visión con un dejo de amargura por haber tomado esas malas decisiones que, se sabe de antemano, no llegarán a buen puerto.
El Porter de mayor edad es acompañado en un teatro vacío por “el director de la obra”, Gabe, interpretado por Jonathan Pryce. De inicio, Cole intenta intervenir en la obra ante sus ojos, pero pronto se da cuenta de que es inútil cambiar el pasado.
Como Porter, Kevin Kline hace un gran trabajo, así como Ashley Judd, quien da vida a Linda Lee Thomas (después, Porter). Ambos fueron nominados al premio Golden Globe en la categoría de actuación en una película musical o de comedia.
Otras personalidades importantes de la época aparecen, como el también gran compositor, Irving Berlin (Keith Allen) y el cofundador de la Metro-Goldwyn-Mayer, Louis B. Mayer (Peter Polycarpou).
La música.
Un buen toque es el de la adición de cantantes famosos interpretando temas de Porter de manera circunstancial, tales como Robbie Williams, Alanis Morissette, Sheryl Crow, Elvis Costello, Diana Krall y Natalie Cole, entre otros. También podemos escuchar a Kline y a Judd.
Dicho esto, el álbum con la banda sonora de la película vale mucho la pena, pues encontramos muchas creaciones de Porter en la voz de músicos actuales.
De-Lovely es un filme peculiar, acerca de una peculiar personalidad del mundo de la música, el cine y el teatro.
A Cole Porter lo han interpretado muchos grandes de la música como Tony Bennett y Lady Gaga. Aquí, una nota al respecto:
Frank Sinatra y sus álbumes de duetos, con algo de la música de Cole Porter:
Y Pink Martini: