Es una película que no fue pensada para ganar ostentosos premios. Su objetivo era presentar una gran pelea que más de uno habíamos imaginado. Es Freddy vs. Jason, de 2003.
Las cintas de terror también tienen a sus héroes. Por definición no se les puede llamar así, pero vamos… ¿quién no tiene un favorito confrontaciones de este tipo?
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En el género de terror, las llamadas slasher films o películas de cuchillazos, son las propuestas menos terroríficas que encontraremos, pues muestran personajes de ficción emanados del inframundo que regresan una y otra vez de la muerte para sembrar el pánico, la destrucción y… sí, la muerte.
Las fórmulas en estas películas son clichescas y predecibles. Pero ahí radica parte de su encanto. Sabemos que el villano, que es el protagonista, no morirá al final de la cinta. Después de todo, normalmente ya están muertos desde un inicio. Además, también representan lucrativas franquicias de cine.
Asimismo, los cruces de marcas han sido, históricamente, atractivas para los seguidores. Y es así que han surgido grandes encuentros entre Avengers, Batman, Superman, monstruos como Godzilla, King Kong, Alien, Depredador y otros.
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La historia de peleas entre monstruos de cine se remonta muchos años atrás, cuando alguna vez Frankenstein conoció al Hombre Lobo, evento que ya hemos cubierto.
Años más tarde, el 15 de agosto de 2003, los amantes del terror pudieron entrar a las salas para salpicarse de sangre con Freddy vs. Jason, filme dirigido por Ronny Yu (Bride of Chucky, 1998).
El presupuesto de tan solo 30 millones de dólares es perfectamente bien utilizado para esta producción de 98 minutos de duración.
La intención inicial es la de ofrecer un filme de tipo B (de bajo presupuesto), con malas actuaciones y un guion que deja mucho que desear. Esto parece casi a propósito y podría ser un homenaje voluntario o involuntario a otras películas de terror, muchas de las cuales son, precisamente, de tipo B.
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En Freddy vs Jason, las cámaras no ofrecen nada nuevo como tampoco lo hace la iluminación. El movimiento de cámaras cumple perfectamente con su cometido, pues no distrae con tomas preciosistas o artísticas, es meramente una efectiva herramienta utilizada como ventana para contar una historia que tiene su clímax en una batalla brutal y sangrienta.
La luz hace lo propio, tal vez no llame mucho la atención, mas es precisa, proyectando las obligadas sombras cuando debe y cambiando los cuadros a colores puros, con motivo y con mensaje: rojos, azules, verdes. Los entornos sobrenaturales reciben este tratamiento en el momento adecuado.
La historia en sí, es lo que esperamos de la propuesta.
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Lo que inicia como una sociedad entre Freddy Krueger (protagonista de Nightmare on Elm Street o Pesadilla en la calle del infierno) y Jason Voorhees (Friday the 13th o Viernes 13), se convierte en una disputa entre ambos por la clientela (llámese víctimas) que culmina en una gloriosa masacre gore.
Freddy vs. Jason, es una continuación de sus respectivos filmes, La Muerte de Freddy: La Pesadilla Final (Freddy’s Dead: The Final Nightmare, 1991) y El último martes 13: La muerte de Jason (Jason Goes to Hell: The Final Friday, 1993).
Un debilitado Freddy engaña a Jason, haciéndose pasar por su madre para convencerlo de viaja a la calle Elm y reiniciar los homicidios. Con lo que Krueger no cuenta, es que Jason no se detendrá por nada una vez que comience, dejando al monstruo de la garra, sombrero y pintoresco suéter, sin víctimas para recuperar su energía.
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La película recuperó su inversión –y un poco más- durante el primer fin de semana y terminó con una recaudación de más de 115 millones de dólares. Esta fue la última vez que vimos al actor de ojos verdes, Robert Englund, como Freddy.
La banda sonora es bastante buena, con música compuesta por Graeme Revell y la Orquesta filarmónica de la ciudad de Praga, además de tres canciones ejecutadas (verbo más que apropiado para la ocasión) por Machine Head. Parte de la música se lanzó al mercado como álbum.
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Otro disco con música de la película salió a la venta, Freddy vs. Jason: The Original Motion Picture Soundtrack, con excelentes canciones metaleras, en géneros como metalcore, industrial y gótico. Algunos de los grupos que se escuchan son Slipknot, Ill Niño, Sepultura y Mushroomhead.
Así que hay muchas razones para disfrutar de Freddy vs. Jason, película que cumple 20 años de su estreno.
Si deseas leer otros improbables encuentros, te ofrezco notas como esta, Frankenstein conoce al Hombre Lobo, el primer filme en ofrecer un cruce entre monstruos:
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Y en comic, Robocop vs Terminator:
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Superman contra Depredador:
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Y Batman contra Predator:
