“Macario”, filme de 1960, es un poema a la muerte

La muerte nos llega a todos por igual, ricos y pobres, y los que se encuentren en medio. “Macario”, filme de 1960, es un poema a la muerte.

(Macario”, filme de 1960, es un poema a la muerte)

Macario. Un acercamiento con la muerte.

La producción es una de las más importantes del cine de México y es una historia surrealista que aborda la importancia de la muerte en dicho país, además de hacer un retrato acerca de las diferencias en las clases sociales que han sido parte integral de la historia de la humanidad.

Macario es un leñador pobre que vive en el bosque con su esposa y sus cinco hijos pequeños. La vida es dura con Macario, pues pese a su arduo trabajo, apenas logra ganar lo necesario para comer. Generalmente, termina cediendo la mayor parte de su comida a sus hijos.

En las vísperas del día de muertos, Macario y su familia ven cómo los ricos pueden comer sin limitaciones y cuantos pavos quepan en sus cocinas.

Cansado de su pobreza, Macario hace una huelga de hambre hasta que tenga la oportunidad de comer todo un guajolote (pavo) él solo. Macario le dice molesto a su esposa que no volverá a “tragar”. “¿No tienes hambre?”, le pregunta ella.

– “¿Hambre? Hambre. Si no he tenido otra cosa en toda mi vida. Como tú, como mis hijos. Nunca he pensado más que en tragar. Nos pasamos la vida muriéndonos de hambre”.

Al cabo de unos días, su esposa, preocupada, se roba un guajolote y lo cocina para Macario. Entonces le dice que se vaya a comerlo solo.

El leñador se interna en el bosque y, antes de que pueda disfrutar del único manjar de su vida, se le aparecen tres hombres en tres momentos distintos, pidiendo un trozo de carne.

El primero de ellos es un arrogante y rico terrateniente que le ofrece, a cambio de un pedazo de guajolote, unas espuelas de plata o unos botones de oro. Como Macario no acepta, el hombre rico le ofrece todo el bosque. Pero Macario lo rechaza de nuevo y se aleja con su banquete.

El segundo hombre es un anciano vestido con una túnica blanca, quien apela a la bondad del leñador para obtener un bocado del ave. “¿Por qué, señor? ¿Por qué? A ti no te interesa este bocado, te interesa un gesto que yo haga, una acción”. Con pesar, Macario lo rechaza de primera instancia y, cuando está a punto de acceder, el hombre se ha desvanecido.

Macario 1960 Dream Sequence

Todo por un bocado.

Macario prosigue su camino hasta el pie de una cueva. Entonces, un hombre vestido de campesino le ruega que le dé de comer. “Tengo mucha hambre, un hambre muy atrasada. Hace miles de años que no como. ¿No podrías convidarme un pedazo?”.

– “Ya sabía que no podía ser verdad. Era mucho pedir. Te voy a convidar. Lo voy a partir a la mera mitad”. Y Macario comparte el guajolote con el hombre.

Agradecido, el campesino regala a Macario la habilidad de curar por medio de agua mágica con la que llena su cántaro. Macario se ha ganado la amistad de la muerte.

Sin embargo, la muerte advierte a Macario que debe utilizar bien su nuevo don y que no desperdicie ni una gota, pues no volverá a darle más.

Lo que haga Macario con su don, cambiará su vida.

La película fue dirigida por Roberto Gavaldón, quien realizó el guion con el escritor y dramaturgo mexicano, Emilio Carballido. La historia está basada en la novela de mismo nombre, de Bruno Traven (acreditado como B. Traven). Esta, a su vez, está influenciada por el cuento de los hermanos Jacob y Wilhelm Grimm, “El ahijado de la muerte” o “La muerte madrina”, publicado en 1812.

Gabriel Figeroa, institución del cine de México, fue el encargado de la fotografía. Gloria Schoemann, se hizo cargo de la edición (o montaje).

La producción fue la primera película mexicana en ser nominada a un premio Oscar de la Academia de Estados Unidos, en la categoría de Mejor Película Extranjera, pero perdió ante “La fuente de la doncella” (“The Virgin Spring” o “Jungfrukällan”), de Ingmar Bergman quien, por cierto, también ganó al año siguiente, con “A través del espejo” (“Through a Glass Darkly” o “Såsom i en spegel”).

Asimismo, Macario fue la cinta representante de México en el festival de Cannes de ese año.

El reconocido actor, Ignacio López Tarso, da vida a Macario; Pina Pellicer, aparece como su esposa, a quien no se le da un nombre propio en la historia y, Enrique Lucero, es la muerte.

“Cuando nacemos ya traemos nuestra muerte escondida”, le dice el cerero a Macario. Hagamos lo que hagamos, algún día daremos nuestro último bocado junto a ella.

Macario (1960) Roberto Gavaldón - Türkçe Altyazılı, English Subtitles

Te presento una nota con otra famosa película de López Tarso, “El hombre de papel”:


Y una nota de nuestra redacción, con el anuncio del fallecimiento del histrión:

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