Del cisma, surge Wolverine and the X-Men.
De las ruinas pueden partir los nuevos cimientos y de los rompimientos, la esperanza. Del cisma, surge Wolverine and the X-Men.

Wolverine y sus X-Men.
El título fue tomado directamente de una serie animada que tuvo éxito, mas no una larga vida. Probablemente, el nombre fue utilizado para el medio impreso para conservar el registro, además de capitalizar en la popularidad de la serie y, de paso, atraer nuevos lectores.
En el comic, se había dado una ruptura en la relación entre Wolverine y Cyclops. Logan cuestionaba el criterio de Scott Summers en cuanto a la dirección que desea para el grupo de mutantes. Después de una pelea de la que parece no haber reconciliación, cada uno toma su camino.
Obviamente, se forman dos bandos.
Con este aparente final, Marvel reestructuró toda la línea de comics de mutantes una vez más, dando un vuelco de timón bastante significativo. Con ello, lanzaron nuevos títulos con nuevos equipos creativos y alineaciones.
Uno de los que más llamó la atención fue, precisamente, Wolverine and the X-Men, debido en parte a su carácter inédito, a su equipo creativo y a la selección de personajes.
El escritor Jason Aaron ya se hacía camino en el medio, habiendo establecido sus comics de Vertigo (DC), Other Side y Scalped. En Marvel, ya había escrito Wolverine. Fue Wolverine and the X-Men, el siguiente paso.

Los participantes.
Por el lado del arte, Chris Bachalo, ya una estrella de la industria, fue asignado para dibujar el comic mensual.
La combinación de Aaron y Bachalo fue tan buena, que poco después repitieron en un extraordinario título de Doctor Strange.
En Wolverine and the X-Men #1, publicado el 26 de octubre de 2011, vemos una perspectiva muy creativa.
Kitty Pryde y Wolverine son los nuevos directores de la escuela para mutantes. Ahora ya no es la escuela de Charles Xavier, sino que ha sido renombrada en honor a Jean Grey. Xavier le ha dado todo su apoyo a Logan en su futura encomienda.
Aun así, ni Kitty ni Logan son las opciones más naturales para dirigir un colegio. Y se nota desde el principio. Por ejemplo, en el primer número, llega un grupo de inspectores del departamento de educación del estado de New York. La inspección sale de la peor manera y el colegio es amonestado.

Lluvia de ideas.
La pareja de Aaron y Bachalo se limitó poco, creando una gama de historias vistosas y divertidas con personajes singulares, como Kid Gladiator, hijo de Gladiator, el gran guerrero del imperio Shi’ar, o el joven e intelectual Broo, un mutante pacífico de la raza de monstruos alienígenas Brood.
Reaparecen, Quentin Quire (Kid Omega), de la temporada de Grant Morrison y Frank Quitely, así como Doop, el extraño mutante flotante cuyo idioma pocos comprenden y exintegrante de X-Force y X-Statix.
El tercer Krakoa, nieto del original, es otro integrante del elenco. El Krakoa original, es la isla que secuestra a los X-Men y que da pie para la formación de un nuevo equipo, con Wolverine, Colossus, Storm, Banshee y Nightcrawler, entre otros.
Iceman, Beast, Rachel Grey (Summers), Toad, Temper y Warbird, fueron otros involucrados.
Algunos excesos se cometen en este título como la introducción de un nuevo Hellfire Club, liderado por un grupo de niños perversos que, si bien podría parecer una buena idea, resulta un tanto inverosímil.
En el balance general, Wolverine and the X-Men fue una gran adición a la iniciativa de los títulos X, llamada ReGenesis.

Aquí encuentras un artículo acerca de otro interesante evento de los X-Men. Batalla por el átomo:







Comentarios