Suele llamársele el grupo de Satélite, pero a estas alturas, es el grupo de México entero. Y muchos dirían que de Latinoamérica. Café Tacvba ha trascendido desde sus inicios en 1989 cuando debutaron en la Ciudad de México. El lugar era el Hijo del Cuervo en el meritito centro de Coyoacán, al sur del entonces Distrito Federal. O capirucha.
Pasarían casi tres años para que dieran a conocer su primer disco, homónimo, en julio de 1992. Contaron con la producción de uno de los grandes músicos de la historia latina, el argentino Gustavo Santaolalla, a quien podríamos llamar “el quinto Tacvbo”. Y no es para menos pues Santaolalla es para Café Tacvuba lo que George Martin es para The Beatles.
Fue con Re, de 1994, que el cuarteto se convirtió en uno de los grupos de rock más importantes de nuestro país, lugar que no dejarían jamás. La cultura mexicana, su poesía y coloquialismos, mezclados con ritmos nacionales y latinos, con influencias de uno que otro grupo como Pink Floyd y un mucho de identidad propia, se convirtieron en parte integral de la agrupación.
En 1995 darían a conocer su MTV Unplugged, nombre de una serie de conciertos acústicos grabados con poca audiencia, a poca luz, en un ambiente íntimo con el que invitados y músicos podían convivir y experimentar una vivencia única. Posteriormente, se editaban y se promocionaban en formato de disco compacto y cassette. Algunos eran lanzados en formato VHS o hasta DVD.
Presentaciones memorables como las de Eric Clapton y su inolvidable concierto de blues (con clásicos como “Layla” y “Tears in Heaven”), o el de Mariah Carey (son su “Emotions” y “I’ll Be There”) dieron origen a esta serie de conciertos. Eventualmente llegaron a Latinoamérica y es que para ese entonces, MTV era uno de los canales de televisión más importantes, todo un estandarte de la juventud y del melómano.
Cuando Café Tacvba hizo su presentación y se transmitió en el canal fue catalogado como uno de los mejores conciertos que MTV hubiera hecho. Los arreglos espectaculares, ingeniosos y creativos demostraron que Tacvba es un grupo que se puede presentar en cualquier escenario y dejará un buen sabor de boca.
En este 2019, se convierte en la única agrupación latina en repetir un concierto Unplugged para MTV (R.E.M. grabó en dos ocasiones). Y la verdad, el cuarteto se mantiene en mucho mejor forma que el canal en sí. MTV ha dejado de ser lo que era, un transmisor de cultura, para convertirse en un productor de poca calidad a diferencia del grupo. Este Unplugged es más necesario para el canal que para la banda. Y al final, los que ganamos somos todos, pues tenemos la oportunidad de escuchar a Tacvba en toda su majestuosidad.
Y majestuosidad es precisamente lo que escuchamos. Arreglos orquestales muy bien logrados, con la ejecución del cuarteto –ahora septeto- en gran forma nos dan la tranquilidad de creer que habrá Café Tacvba para muchos años más.
Si bien la orquesta puede escucharse demasiado predominante en ocasiones, se logra un buen equilibrio y el resultado es algo novedoso y refrescante. 17 canciones fueron incluidas en la grabación -realizada en el Teatro Nezahualcóyotl dentro de las instalaciones de la UNAM al sur de la Ciudad de México-, muchas de las cuales no existían aún para cuando se realizó el primer concierto “Desenchufado”. Ejemplos son “La locomotora”, “La muerte chiquita” –convertida en deliciosa sandunga- o “La 11” de los discos Yo soy/ Revés.
Otras, como el popurrí de “Las batallas” y “Rarotonga”, son de su primer disco, más no se incluyeron en el concierto del ’95.
También cuentan con músicos invitados, como el propio Gustavo Santaolalla para “Olita de altamar” (de “El objeto antes llamado disco”), Catalina García -del grupo colombiano Monsieur Periné- en “Enamorada” (del disco Jei Beibi y de la autoría de Meme). El escocés David Byrne, de los Talking Heads y quien ya había colaborado con Tacvba, interpreta con ellos “El Outsider” (de Sino).
Mención aparte merece “Mediodía” del disco Cuatro Caminos, en el que Rubén canta acompañado de un cilindro, tan típico de las calles del centro en la capital del país. En el track, se integra también la orquesta, enorme, con sabores oaxaqueños y Moncayescos que, si fuera comida, se convertiría en el más delicioso mole.
Nuevamente, el grupo hace una actuación memorable de la cual se hablará durante muchos años. Y tenemos la suerte de que llegara en este 2019. El disco se encuentra íntegramente en formato de audio en Spotify y esperamos que próximamente esté a la venta.