Como he comentado anteriormente en esta columna, el comic de The Uncanny X-Men fue durante varias décadas, el más famoso –y más vendido- de Marvel, cuyas historias y personajes marcaban la pauta en la industria. De mediados de los 70’s hasta principios del nuevo siglo, los mutantes trazaban el rumbo de Marvel y de la industria. Los creadores más importantes se asignaban tanto a Uncanny X-Men, como a sus títulos derivados.
El gran arquitecto de este micro universo de Marvel Comics, fue el escritor Chris Claremont quien, partiendo de un gran concepto fraguado por el también escritor y editor Len Wein y el escritor y dibujante Dave Cockrum, desarrollo un enorme número de conceptos, personajes e historias. Wein, Claremont y Cockrum crearon la base de los nuevos X-Men, así como a varios de sus protagonistas. Posteriormente, Claremont trabajó con otros ilustradores y coescritores, como John Byrne, Paul Smith, John Romita junior, Barry Smith, Rick Leonardi, Marc Silvestri, Art Adams, Alan Davis y Marc Silvestri, entre otros.
Fue en 1989 que se unió al título un dibujante que se convirtió en una de las estrellas más importantes de Marvel: Jim Lee, quien se había dado a conocer ilustrando Alpha Flight (también título de mutantes), además de ayudar a lanzar un nuevo comic para un vigilante sumamente famoso en los 80’s y 90’s: Punisher War Journal. En 1989, Jim Lee fue integrado como dibujante regular a Uncanny X-Men.
La era Claremont/ Lee (sin relación de parentesco a Stan Lee) fue sumamente fructífera. El escritor era conocido por ser impredecible con el título y dar giros a la historia de manera inesperada. Era tan bueno su trabajo que incluso podía cambiar casi por completo a su reparto de X-Men y el equipo continuaba siendo popular. Una de las grandes inclusiones de la década de los 90’s fue el mutante conocido como Gambit (Gambito en México, conocido por la serie animada).
La mancuerna Claremont/ Lee creó al mutante para el comic Uncanny X-Men #266 con fecha de publicación del 19 de junio de 1990. Sin embargo, en este número, Jim Lee no hizo el dibujo interior, mismo que corrió a cargo de Michael Collins, mientras que el arte de la portada es de Andy Kubert.
Existe un debate en cuanto a la primera aparición de Gambit, pues es el #266 de Uncanny la que se considera como su primera aparición y la que es buscada por los coleccionistas. Realmente la primera aparición fue el 29 de mayo de 1990 en el comic Uncanny X-Men Annual #14, por Claremont y Art Adams, aunque la historia se sitúa después del #266. Los coleccionistas pagan más por el #266 por ser cronológicamente cuando Storm y Gambit se conocen.
Cuando se le presentó, Gambit era enigmático y, muy en la tradición Claremont, se conocían muy pocas cosas acerca de él, como su nombre verdadero y motivaciones. El misterio era característico de él y lo hacía parecer que ocultaba algo, tanto en su pasado como en sus motivos. Esto generaba desconfianza en el resto de sus compañeros, principalmente en Wolverine y Jubilee.
Con acento francés representativo de las regiones de New Orleans y Luisiana, Gambit también era un casanova y se le podía tildar de macho.
En su primera aparición, el franchute conoce a Storm (Tormenta), convertida en niña y quien huye de la ley pues se le busca por homicidio. Gambit la ayuda y protege. Eventualmente, Storm lo lleva a la mansión de Charles Xavier donde conoce al resto del equipo, que se encuentra prácticamente desmantelado. Sin más, Gambit se une a The X-Men.
Pocos números después se conforma una nueva alineación de X-Men que incluye a Wolverine, Storm (adulta de nuevo), Banshee, Psylocke, Forge, Jubilee y Gambit. Pocos de ellos se conocen entre sí, por lo que la cuestión de la falta de confianza juega un papel importante.
En esa temporada, Gambit poseía mayores habilidades: era extremadamente ágil, carismático, audaz y era capaz de derrotar a Wolverine en combate mano a mano (aunque siendo justos, Logan no se encontraba en su mejor forma). También fue pieza clave para lograr que The X-Men triunfaran cuando habían sido secuestrados y llevados a la nación conocida como Genosha.
Y ya que mencionamos las palabras “pieza clave”, Gambit, o gambito, es el nombre de una jugada en el ajedrez en el que se está dispuesto a sacrificar a una pieza para salvar a otra.
La popularidad del nuevo mutante rivalizó incluso con la de Wolverine, aunque tiempo después, y tras la salida de Uncanny X-Men de sus creadores, el personaje fue quedando en segundo plano. Aún con eso, continúa siendo uno de los X-Men más recurridos y reconocibles. En varias ocasiones, ha protagonizado sus propias series y miniseries. Gambit hoy ya no es de “los nuevos” X-Men, pues se cumplen 30 años de su debut.