Existen miles de películas de amor, de romance. También las hay acerca de amistad verdadera. Y de música. Es La leyenda de 1900, de Giuseppe Tornatore.
Hay personas que son como cometas… tenemos la suerte de poder ver uno en la vida. E igual pasan y no vuelven; sin embargo, ya te han tocado y te cambian para toda la vida. Algunos cometas surcan el océano; otros, tocan el piano; y los menos… hacen ambas cosas.
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Inspirado en el monólogo teatral de Alessandro Baricco, Novecento (Siglo XX), The Legend of 1900, es un filme escrito y dirigido por Giuseppe Tornatore, con las magníficas actuaciones de Tim Roth (como 1900), Priutt Taylor Vince (Max “Conn” Tooney) y Mélanie Thierry (como “La chica”).
Teniendo ese cartel es difícil pensar que al filme no le fue mejor, que también fue el primero de Tornatore que se rodó en el idioma inglés. Si sumamos el hecho de que la banda sonora es de Ennio Morricone y que, además, es un trabajo más que inspirado del compositor, tenemos como resultado un pequeño paquete perfecto de poco más de dos horas.
Entre las mejores películas de Tornatore, se cuentan Cinema Paradiso y Malèna. La leyenda de 1900, bien tiene lugar entre ellas.
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El Virginian, es un barco de pasajeros que viaja de Europa a Estados Unidos y de regreso. Uno de los trabajadores del cuarto de máquinas, Danny Boodman (Bill Nunn), encuentra en la nave a un recién nacido abandonado, dentro de una caja de limones de la marca T.D. Lemon.
Danny decide quedarse con el niño y criarlo para que no termine en un orfanato. Cuando sus amigos le preguntan cómo habrá de llamarlo, decide que será Danny Boodman T.D. Lemon 1900. El último nombre es debido a que lo encuentra en el primer mes del año 1900.
A los 8 años, 1900 se aventura a conocer el resto del barco (lo cual está prohibido para los trabajadores). Cuando llega al gran salón, el pequeño descubre la música, el piano y así, su propósito en la vida… la música.
1900 se convierte en adulto a bordo del Virginian, trabajando como el pianista de la banda. Una vida siempre en movimiento es la de 1900, el mejor pianista sobre la tierra… que nunca ha pisado tierra. Su fama atraviesa los maderos y metales del barco y se esparce por dos continentes.
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27 después del nacimiento de Lemon (o 1900), Max, un virtuoso trompetista, llega a trabajar al Virginian y conoce la leyenda de 1900, un hombre que no existe en registro alguno, sin acta de nacimiento, ni fecha exacta de su alumbramiento y de quien no se sabe su origen, solo que toca la música más extraordinaria jamás escuchada.
Las travesías de 1900 son todo menos aburridas ya que, en una de ellas, encontrará un rival que podría ponerlo en vergüenza, el autoproclamado “inventor del jazz”, Jelly Roll Morton (basado en el músico real de mismo nombre e interpretado en el filme por Clarence Williams III). ¿Qué pasa cuando al tímido pianista lo reta a un duelo musical uno de los músicos más famosos sobre la faz del planeta?
En otro de sus viajes, 1900 conoce a una hermosa y, en el instante que la ve, conoce el amor.
La fama de 1900 se propaga a tal grado, que un equipo de producción musical sube al Virginian para grabarle un disco, que puede resultar en el inicio de su carrera musical y de su vida en tierra firme.
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Lo que pueda escribir acerca de este filme, simplemente no le hará justicia. Al inicio comento que su origen es un monólogo teatral -que también existe como libro-; sin embargo, la versión fílmica de Tornatore es más bien una poesía con música.
Morricone bien pudo haber tenido un crédito histriónico en la producción, pues su bella banda sonora es un personaje más y nos hace creer la inspiración sin límites del “pianista sobre el mar”. La música creada por el compositor, es una de las mejores de su extensa carrera.
En esta cinta, la música es imprescindible para contar emotivamente la vida y obra del mejor pianista que jamás existió, en una de las más notables interpretaciones de Tim Roth.
Clásica, tarantela, tango, ragtime y jazz, son algunos de los géneros que Morricone aborda con maestría. En los créditos, se incluye un tema que el italiano compuso con el exlíder de Pink Floyd, Roger Waters, titulada “Lost Boys Calling” (“El llamado de los jóvenes perdidos”).
La leyenda de 1900, es una de las joyas ocultas del cine que tuvo su estreno, el 28 de octubre de 1998 en Italia.
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Pronto hablaremos acerca de Nuovo Cinema Paradiso, con motivo de su 35 aniversario. Mientras tanto, te ofrezco otras notas relacionadas a nuestro tema como otro filme con música de Morricone, Los intocables, con Kevin Costner, Sean Connery y Robert De Niro:
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El bueno, el malo y el feo, con Clint Eastwood, Lee Van Cleef y Eli Wallach:
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Una nota luctuosa del maestro Morricone:
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Y dos filmes de Tim Roth, Perros de Reserva, de Tarantino:
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Y Pulp Fiction, de… ¿hace falta decirlo?:
